El mercado del gas anticipa precios de la electricidad por encima de 80 euros hasta la primavera de 2022
El mercado mayorista se sitúa en 99 euros para este martes tras el alivio del fin de semana. La media mensual de julio es la más alta de la historia
El precio medio de la electricidad en el mercado mayorista volverá este martes al umbral de los 100 euros megavatio hora (MWh) en España y Portugal. En concreto se situará en 99,05 euros MWh, lo que supone un cambio tras el alivio del fin de semana. El precio máximo para mañana será de 104,54 euros, que se producirá a las nueve de la mañana, mientras el mínimo se situará en 88,75, a las seis de la tarde. Según datos del O...
El precio medio de la electricidad en el mercado mayorista volverá este martes al umbral de los 100 euros megavatio hora (MWh) en España y Portugal. En concreto se situará en 99,05 euros MWh, lo que supone un cambio tras el alivio del fin de semana. El precio máximo para mañana será de 104,54 euros, que se producirá a las nueve de la mañana, mientras el mínimo se situará en 88,75, a las seis de la tarde. Según datos del Operador del Mercado Ibérico de Electricidad (Omie), la media del precio medio diario mayorista se sitúa en los primeros 27 días de julio en 93,11 euros MWh, el precio medio mensual más alto desde que hay registros. Para este miércoles, el precio bajará a 95,57 euros MWh, pero sigue por encima de esa media.
Esto denota la dificultad que existe para contener la escalada en el mercado mayorista, sobre los que existe la previsión de que estarán por encima de los 80 euros MWh al menos hasta febrero y marzo del próximo año. Esta previsión se basa en que no se vislumbran cambios en el mercado de futuros de la electricidad, que se forma teniendo en cuenta el precio previsto del gas natural, principal causa junto al mercado de derechos de CO₂ del encarecimiento de la energía. Según los datos del mercado de futuros del operador ibérico, además de mantenerse en cifras que superan los 90 euros en 2021, para el primer trimestre de 2022 se mantiene en torno a los 85 euros/MWh y tiene una media para todo el año de 72,85 euros/MWh.
La elevada cotización del gas se debe a la fuerte demanda de China y las restricciones de Rusia en el suministro a Europa, que hace que los precios del Title Transfer Facility (TTF), hub de referencia europeo, que marca el precio en el mercado spot (el sistema de casación de precios con la demanda esperada) de Holanda, mantienen el valor en cotas máximas: este lunes era de 36,92 euros MWh. Este precio se ha multiplicado por seis sobre el que había hace un año, cuando estaba en mínimos. El precio en el Mercado Ibérico del Gas (Mibgas) está en casi 39 euros MWh.
Tanto la Administración como los expertos y las empresas vaticinan que, a no ser que haya mucho viento, se calme el mercado y Rusia abra el grifo, será difícil una relajación de los precios del mercado mayorista. Esa circunstancia ha provocado que algunos Gobiernos europeos, entre ellos el español, hayan reclamado a la Comisión Europea una reflexión sobre el sistema de fijación de precios, así como del mercado de derechos de CO₂, que se ha disparado como consecuencia de la entrada masiva de fondos internacionales. En concreto, ese mercado cerró el viernes a 50,88 euros/tonelada, un 0,31% más que el jueves, y en lo que va de julio la media llega a 53,24 euros, por encima de los 52,78 euros de la de junio, mes en el que se alcanzó el récord mensual histórico.
Los altos precios son algo común en toda Europa aunque cada país tenga sus características propias. En el caso de Italia se dispara a 112,35 euros/MWh. Los precios también superan los 100 euros en los países del Este de Europa, mientras bajan de 90 en Polonia, Alemania y Francia, donde mañana el MWh costará 82,11; 87, 22 y 84,39 euros, respectivamente. En todo caso, son más bajos que en España porque el precio marginal que entra en esos países es el carbón, cuya producción es más barata y llega a representar el 30% del mix de generación (en el caso francés, el precio marginal del carbón se produce porque lo recibe a través de la conexión con Alemania y es el último que entra en la subasta a precios más bajos). En España, el último que entra es el gas porque ya no hay apenas carbón. No obstante, son también precios excepcionales por su carestía.
Peso en la factura
El precio de la energía en el mercado mayorista tiene un peso de casi el 25% en la factura de la luz, correspondiendo el resto a los peajes (coste de las redes de transporte y distribución) y cargos (asociados al fomento de las renovables, los costes extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa) e impuestos. Afecta a los consumidores acogidos a la tarifa regulada (PVPC), unos 10,5 millones de hogares, y no a los del mercado libre, si bien muchos de los contratos que tienen las comercializadoras con sus usuarios contienen cláusulas de modificación de precios dependientes de la evolución del mercado.
Estas subidas originaron que el Gobierno aprobara un real decreto-ley por la vía de urgencia para reducir los impuestos que se aplican al suministro de energía eléctrica para hogares, autónomos, pymes y el conjunto de las empresas, con la bajada del IVA del 21% al 10% hasta final de año y la suspensión durante tres meses del impuesto del 7% a la generación eléctrica que las empresas luego repercuten en el recibo.
En el caso concreto del IVA, se aplica una bajada al 10% hasta fin de año para todos los consumidores con potencia contratada hasta 10 kilovatios (kW), siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por megavatio hora (MWh). En lo que se refiere a la suspensión del 7% del impuesto sobre el valor de producción de energía eléctrica, que ya en 2018 se decidió su suspensión temporal durante seis meses para contener otra ola alcista en el precio de la luz, estará vigente durante el tercer trimestre de este año. Algunas asociaciones se quejan de que viviendas unifamiliares con equipos de climatización centralizada con frío y calefacción, que además cuenten con cargador para el coche eléctrico pueden quedarse fuera de la rebaja del impuesto de valor añadido, debido a que deben contratar potencias altas para poder cubrir los picos de potencia puntuales.
Esta decisión alivió al menos algo la fuerte subida del precio de la energía, que hizo que la factura de la luz subiera en junio hasta 83,29 euros de media y que el recibo (añadidos peajes, cargos e impuestos) subiera un 35% sobre el mismo mes del año anterior, según datos de Facua-Consumidores en Acción. El récord marcado durante junio de 2021 supera con creces la anterior marca registrada en septiembre de 2008. Trece años atrás el máximo registrado fue de 73,03 euros, según el gestor del mercado OMIE.
Para un consumidor tipo acogido a la tarifa regulada (con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo mensual de 250 kilovatios hora al mes), el recibo de la luz en los primeros 26 días de julio sería de 60,39 euros, en parte por el efecto de la bajada del IVA. La factura de esos primeros 26 días es un 4 % inferior (2,54 euros menos) a la del mismo periodo de junio, cuando se alcanzó el recibo más alto del año, 62,94 euros (un 3,6% más que en mayo, que era hasta el de junio el mayor del año). Comparado con los 26 primeros días de julio de 2020 (año marcado por la pandemia y los confinamientos) sería un 31,54% más cara (14,48 euros). Y si la comparación se hace con esos mismos días de julio de 2019, un 14,24 % superior (7,53 euros más), según informa Efe.