La Bolsa de Nueva York da marcha atrás y no expulsará a tres grandes operadoras chinas
La decisión se produce después de que Trump prohibiera invertir en empresas presuntamente ligadas al Ejército chino
Como hipotética señal de armisticio en la guerra comercial que mantienen Estados Unidos y China, el New York Stock Exchange (NYSE, en sus siglas inglesas; el gestor de la Bolsa de Nueva York) ha dado marcha atrás en su decisión de expulsar del mercado estadounidense a las operadoras estatales China Mobile, China Telecom y China Unicom, que podrán así seguir cotizando en el parqué neoyorquino.
“Tras consultar con las autoridades reguladoras pertinentes, NYSE anuncia que ya no tiene la intención de continuar excluyendo a los tres emisores, como se anunció el 31 de diciembre de 2020”, ha c...
Como hipotética señal de armisticio en la guerra comercial que mantienen Estados Unidos y China, el New York Stock Exchange (NYSE, en sus siglas inglesas; el gestor de la Bolsa de Nueva York) ha dado marcha atrás en su decisión de expulsar del mercado estadounidense a las operadoras estatales China Mobile, China Telecom y China Unicom, que podrán así seguir cotizando en el parqué neoyorquino.
“Tras consultar con las autoridades reguladoras pertinentes, NYSE anuncia que ya no tiene la intención de continuar excluyendo a los tres emisores, como se anunció el 31 de diciembre de 2020”, ha comunicado este martes la entidad.
Según la decisión original, en cumplimiento de la orden ejecutiva que el presidente Donald Trump emitió en nombre en la que prohibía a empresas y particulares estadounidenses invertir en empresas presuntamente vinculadas al Ejército chino, la exclusión de las tres operadoras chinas habría debido producirse antes del próximo lunes, aunque las compañías tenían derecho a recurrir la medida. El decreto ley firmado por Trump impide que empresas o ciudadanos estadounidenses posean acciones directamente o a través de fondos de inversión de alguna de las 35 empresas que Washington considera colaboradoras de las fuerzas armadas chinas, entre las que se cuentan las tres grandes del sector de las telecomunicaciones.
Para justificar una medida adoptada en la recta final de su mandato, Trump declaró que los inversores estadounidenses están ayudando a China “a amenazar directamente el territorio de Estados Unidos y a las fuerzas estadounidenses en el extranjero, con el desarrollo y despliegue de armas de destrucción masiva, armas convencionales avanzadas y acciones cibernéticas maliciosas contra Estados Unidos y sus habitantes”. Para muchos analistas, sin embargo, la decisión solo revelaba las contradicciones de la Administración republicana a la hora de impulsar sanciones por sus implicaciones económicas para los inversores.
La Comisión Reguladora de Valores de China criticó en su día que la orden ejecutiva se basara en “motivaciones políticas”, ignorando por completo la situación real de las empresas relevantes y los derechos legítimos de los inversores, lo que dañaba gravemente las reglas del mercado y la libre competencia.
En sendos comunicados, China Unicom y China Telecom indicaron que continuarán “monitorizando el desarrollo de la situación”. Las acciones de China Unicom han registrado una subida del 8,50% en la Bolsa de Hong Kong tras el anuncio del NYSE, mientras que los títulos de China Mobile se anotaron un alza del 5,13% y los de China Telecom, del 3,35%.
Una vez confirmada en su puesto por el Senado resultante de las decisivas elecciones parciales que se celebran este martes en Georgia, la nueva secretaria del Tesoro, Janet Yellen, heredará el envenenado dosier comercial chino, con su arsenal de aranceles y sanciones, y deberá gestionar un enfrentamiento que en EEUU rebasa las líneas partidistas y se considera de interés nacional para domeñar a su gran competidor estratégico.