Los bancos centrales evitan otro desplome de las Bolsas por el coronavirus
El anuncio de la Fed de que está lista para actuar ante la epidemia anticipa una pronta rebaja de los tipos en EE UU
Todo apuntaba a una nueva jornada negra, pero las Bolsas acabaron dándose la vuelta. Pese a abrir ayer con subidas, el Ibex llegó a caer a media mañana un 2%, para finalmente cerrar con un ligero rebote del 0,21%. La evolución del resto de parqués europeos fue similar. Entre medias, los inversores reaccionaron ante la cada vez más evidente disposición de los bancos centrales a actuar por la amenaza económica en que ya ha mutado el coronavirus. Las fu...
Todo apuntaba a una nueva jornada negra, pero las Bolsas acabaron dándose la vuelta. Pese a abrir ayer con subidas, el Ibex llegó a caer a media mañana un 2%, para finalmente cerrar con un ligero rebote del 0,21%. La evolución del resto de parqués europeos fue similar. Entre medias, los inversores reaccionaron ante la cada vez más evidente disposición de los bancos centrales a actuar por la amenaza económica en que ya ha mutado el coronavirus. Las fuertes alzas en las Bolsas estadounidenses cimentaron la tregua en los mercados europeos.
Los frenéticos movimientos de las Bolsas de estos días son la mejor muestra de la volatilidad —o nerviosismo— con la que el coronavirus ha infectado a la economía global. “Hay psicosis en los mercados”, resume Pablo Fernández de Mosteyrín, de Renta 4 Banco. El nerviosismo se ha contagiado desde China —donde nació la epidemia y que acaba de publicar los peores datos adelantados de producción desde 2005, cuando empezaron a datarlos— a Occidente.
Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de EE UU, mostró el viernes su preocupación. Dijo observar de cerca la evolución de la epidemia y sus efectos. “Usaremos nuestras herramientas y actuaremos para apoyar a la economía”, dijo Powell, el hombre que ha resistido numantinamente las presiones del presidente Donald Trump para bajar los tipos de interés. Ahora, los analistas creen que el virus va a tener más éxito y le forzará a Powell a recortar tipos probablemente este mes.
Un mensaje similar llegó del Banco de Japón y del Banco Central Europeo. Tras admitir que el brote supone una nueva incertidumbre sobre el crecimiento, el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, dijo estar “vigilante” ante los datos que lleguen. En otras palabras: el BCE actuará —rebajando tipos— si es necesario, por mucho que su margen de acción esté prácticamente agotado.
Esta actitud de los bancos centrales evitó ayer una nueva sangría en las Bolsas. Los grandes índices europeos, excepto el Dax alemán y el Mib italiano, cerraron al alza. Y Wall Street. después de la peor semana desde la caída de Lehman Brothers, cerró este lunes con una subida del 5,09%.
Esto no evitó en España un nuevo desplome del grupo IAG. Si se suma la caída de ayer de casi el 10% a la de las últimas semanas, el grupo de aerolíneas se ha dejado un 36% de su valor en Bolsa desde el primer contagio en Italia.
“La subida de ayer solo se explica por los esfuerzos de Gobiernos y bancos centrales por contener los efectos de la epidemia. Pero la volatilidad va a continuar. Porque nadie se atreve a responder la gran pregunta: ¿cómo de grande va a ser el contagio”, responde Joaquín Robles, analista en XTB.