El presidente saliente del CSN pide a Pastor que frene la renovación del organismo

Fernando Martí, presidente del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), ha enviado una carta a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, en la que le pide quefrene la renovación del organismo, del que él debe salir por cumplimiento de mandato. Martí solicita a Pastor una reunión para el próximo viernes y plantea, en concreto, el rechazo a Francisco Castejón como miembro del organismo. Castejón fue nombrado por el Consejo de Ministros a propuesta de Podemos, junto a otros tres candidatos del PSOE (Elvira Romera, María Pilar Lucio y Josep María Serena i Sender), para renovar el citado ...

Fernando Martí, presidente del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), ha enviado una carta a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, en la que le pide quefrene la renovación del organismo, del que él debe salir por cumplimiento de mandato. Martí solicita a Pastor una reunión para el próximo viernes y plantea, en concreto, el rechazo a Francisco Castejón como miembro del organismo. Castejón fue nombrado por el Consejo de Ministros a propuesta de Podemos, junto a otros tres candidatos del PSOE (Elvira Romera, María Pilar Lucio y Josep María Serena i Sender), para renovar el citado CSN. Los nuevos deben ser ratificados por el Congreso de los Diputados en el plazo de un mes.

Fernando Martí, que ha pedido una reunión con Ana Pastor para el 1 de marzo para transmitirle sus argumentos, considera que la presidenta del Congreso debe tener en cuenta su información "para la adopción de decisiones ulteriores en relación con la tramitación de las mencionadas propuestas de designación de candidatos a formar parte del CSN". La renovación nació con polémica. El Gobienro propuso nombrar a dos candidatos del PSOE, uno del PP y otro de Podemos, que se unirían al que queda, también del PP. Sin embargo, el PP se negó a proponer un candidato mientras no se retirrase al de Podemos y se nombrase a un independiente. Ante ello, el Gobierno dejó al de Podemos y permitió que el PSOE propusiera a tres.

Precisamente la carta desbarra especialmente contra Francisco Castejón. Martí considera que está invalidado para formar parte del CSN por incurrir en conflicto de intereses por su relación con la Asociación Ecologistas en Acción. Según Martí, Castejón se ha manifestado, como portavoz de la campaña antinuclear, “reiterada y públicamente en contra de la energía nuclear y reclamado el cierre de las centrales nucleares”.

Asimismo, sostiene, que ha asistido como representante legal de Ecologistas en Acción a la reuniones del Comité Asesor para la Información y Participación pública sobre seguridad nuclear y protección radiológica que emite recomendaciones asesorando al CSN. De sus declaraciones “se demuestran sus posiciones críticas, de denuncia y, en muchos casos, de descalificación de las actuaciones del CSN y de los estudios técnicos que los expertos del organismo han elaborado”.

Según Martí, la asociación “ha presentado demandas y denuncias, interponiendo recursos en varios ámbitos jurisdiccionales contra el CSN”. “Es significativa”, continúa, “la presentación de un recurso contencioso-administrativo en relación con el plan de rehabilitación preliminar de la zona de Palomares [donde cayeron cuatro bombas nucleares de un avión estaodunidense en 1966] , así como un recurso contra la orden ministerial del 17 de spetiembre de 2015 por la que se concede a Berkeley Minera España autorización como instalación radiactiva de primera categoría respecto de su planta de concentrados de uranio en Retortillo (Salamanca)”.

“Quisiera resaltar que, a mi entender, resulta prohibido que los intereses personales de un alto cargo puedan influir indebidamente en el ejercicio de sus funciones y responsabilidades, y uno de los casos que la ley cita como supuesto en el que se incurre en la prohibición es la existencia de personas con quien tenga una cuestión litigiosa pendiente, hecho que se constata en este caso”, añade Martí, que aventura que, de seguir adelante, “podría dar lugar a escenarios indeseables con deterioro del cumplimiento, credibilidad e imagen de la institución”, así como “generar perjuicios” en la seguridad nuclear y radiológica en España.