Goldman Sachs trata de lavar su imagen y prohíbe a sus empleados invertir en Bolsa

El banco quiere evitar conflictos de interés y lavar su imagen tras los abusos de la crisis

Lloyd Blankfein, presidente de Goldman SachsBLOOMBERG

Goldman Sachs, también conocido como el guardián de Wall Street, refuerzar las reglas internas sobre las inversiones que pueden hacer sus banqueros a título personal. Pretende así reducir al máximo el riesgo de que sus empleados pongan sus intereses por delante de los de sus clientes o de la propia entidad. La nueva medida entra en vigor en plena controversia sobre la permisividad de la Reserva Federal con la firma que dirige Lloyd Blankfein.

El banco de inversión neoyorquino no contaba hasta ahora con una política de calado para regular el conflicto de interés. Ahora se prohíben las co...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Goldman Sachs, también conocido como el guardián de Wall Street, refuerzar las reglas internas sobre las inversiones que pueden hacer sus banqueros a título personal. Pretende así reducir al máximo el riesgo de que sus empleados pongan sus intereses por delante de los de sus clientes o de la propia entidad. La nueva medida entra en vigor en plena controversia sobre la permisividad de la Reserva Federal con la firma que dirige Lloyd Blankfein.

El banco de inversión neoyorquino no contaba hasta ahora con una política de calado para regular el conflicto de interés. Ahora se prohíben las compras de acciones y de bonos, así como las inversiones en fondos especulativos o a través de carteras gestionadas por activistas. Goldman Sachs trata así de recomponer su imagen, muy dañada por los abusos de la crisis financiera.

Este paso, de hecho, coincide en el tiempo con la demanda presentada por una antigua supervisora de la Reserva Federal de Nueva York, que fue despedida en 2012 tras denunciar en un informe que los conflictos de interés eram algo muy extendido en el banco de inversión. La funcionaria grabó las conversaciones entre el supervisor y los directivos del holding bancario.

La medida coincide en el tiempo con la demanda presentada por una antigua supervisora de la Reserva Federal de Nueva York

Tras el colapso de Lehman Brothers, la Fed decidió poner supervisiones dentro de los bancos para que actuaran a modo de policías. Las grabaciones, hechas públicas por la emisora NPR y el portal de investigación ProPublica, revelan que Goldman Sachs contaba con documentos de orientación para evitar situaciones de conflicto de interés pero no una política concreta.

Hasta ahora, los empleados banco en la división que asesora a las corporaciones en operaciones estratégicas, como adquisiciones o venta de acciones, sólo tenían que pedir permiso para realizar inversiones a título personal. Las nuevas restricciones se aplican también a algunos empleados fuera de la división de banca de inversión que tienen acceso a información confidencial.

La senadora demócrata Elizabeth Warren, miembro del comité financiero y principal defensora de que se refuercen los controles a las grandes firmas de Wall Street, acaba de solicitar la convocatoria de un comisión que analice lo sucedido. Goldman Sachs, por su parte, explica que las nuevas reglas llevan elaborándose desde hace tiempo y rechaza cualquier vinculación con el caso.

Los documentos revelados por la antigua detective de la Fed hacen referencia también a una operación de Goldman Sachs diseñada para elevar los niveles de capital del grupo Santander y ayudar así a reforzar sus cuentas. En ningún momento se cuestiona la legalidad de la transacción, que se hizo el día de Reyes, pero sí hasta qué punto la Reserva Federal dio su consentimiento.

La operación en cuestión es conocida y está relacionada con la venta de algunas acciones de la filial brasileña. Ahora se sabe que la contraparte era Goldman Sachs. El banco de inversión se embolsó plusvalías de 40 millones de dólares. La Fed de Nueva York, la sucursal del banco central que regula Wall Street, rechaza por su parte haber sido permisivo con la firma.

Archivado En