La primera crisis del euro

Alemania condiciona el rescate de Grecia a un nuevo plan de ajuste

"La respuesta puede ser negativa", advierte el ministro de Finanzas alemán

La zona euro aprobó hace unas semanas los detalles de un posible plan de rescate a la economía griega. El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, pidió auxilio a sus socios europeos y al FMI el pasado viernes. Pero ni una cosa ni otra han bastado para atajar la espiral especulativa en los mercados de deuda pública. Los inversores dudan de que la ayuda (45.000 mil...

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La zona euro aprobó hace unas semanas los detalles de un posible plan de rescate a la economía griega. El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, pidió auxilio a sus socios europeos y al FMI el pasado viernes. Pero ni una cosa ni otra han bastado para atajar la espiral especulativa en los mercados de deuda pública. Los inversores dudan de que la ayuda (45.000 millones de euros en créditos) llegue a tiempo. Y, a tenor de las declaraciones del ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, son dudas bien fundadas. "Ni la UE ni el Gobierno alemán han tomado todavía una decisión, lo que significa que la respuesta puede ser positiva o negativa", advierte Schäuble en un artículo publicado por el diario dominical Bild am Sonntag.

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En las declaraciones, recogidas por la agencia Reuters, el ministro de Finanzas aclaró que Grecia debe presentar "un duro programa de reestructuración" para los próximos años antes de recibir el sí alemán. "Es un prerrequisito absoluto e inevitable", afirmó Schäuble. "El respaldo al plan de ayuda", insistió el ministro alemán, "depende completamente de que Grecia continúe en los próximos años el camino de ahorro estricto que ha comenzado". La Comisión Europea apoyó el programa de reequlibrio presupuestarios que presentó Papandreu para este año, pero (como ha hecho con otros países, incluída España ) pidió detalles adicionales sobre cómo hará para ahorrar gastos y generar ingresos a partir de 2011.

En todo caso, la respuesta alemana no será inminente, lo que se traducirá, previsiblemente, en una nueva vuelta de tuerca sobre la deuda pública griega, cuyo coste de colocación supera con creces el 8% (por el 3% para los bonos alemanes, o el 4% para los españoles). Y eso que el Gobierno griego debe hacer frente al pago de 10.000 millones en mayo por vencimientos de deuda antigua . "Tenemos tiempo para examinar la petición griega", aseguró Schäuble, quien matizó que ha convocado a los grupos parlamentarios alemanes para acordar un procedimiento urgente.

La ayuda de Alemania, que sería el mayor contribuyente al rescate con créditos por valor de 8.400 millones de euros, debe ser aprobada por el Parlamento alemán, un trámite que Schäuble ligó a la aprobación previa en el Consejo de la UE. Ningún analista da un euro porque nada de esto pueda producirse antes de las elecciones del 9 de mayo en el Estado de Renania Westfalia: los conservadores, que gobiernan este estratégico Estado alemán, están convecidos de que el rescate a Grecia no es plato de buen gusto para su electorado.

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