POLÍTICA MONETARIA

El Banco de Japón retoma la política de 'tipos cero' para frenar la recesión

La medida no estimula la Bolsa de Tokio cuyo índice Nikkei retrocede un 0,34%

Para Sumusu Takahashi, economista jefe de Japan Research Institute, la decisión de la máxima autoridad monetaria del país pone de manifiesto que "ha capitulado frente a las presiones del Gobierno y los grupos industriales", ya que las medidas expuestas hoy para hacer frente al estancamiento de la economía "van más allá del mantenimiento de los tipos a bajo nivel".

El Banco Central de Japón ha adelantado además, al término de la reunión de su consejo de gobierno, que incrementará el montante de liquidez en el mercado monetario de 4 a 5 billones de yenes (de 6,034 a 7,542 billones de pese...

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Para Sumusu Takahashi, economista jefe de Japan Research Institute, la decisión de la máxima autoridad monetaria del país pone de manifiesto que "ha capitulado frente a las presiones del Gobierno y los grupos industriales", ya que las medidas expuestas hoy para hacer frente al estancamiento de la economía "van más allá del mantenimiento de los tipos a bajo nivel".

El Banco Central de Japón ha adelantado además, al término de la reunión de su consejo de gobierno, que incrementará el montante de liquidez en el mercado monetario de 4 a 5 billones de yenes (de 6,034 a 7,542 billones de pesetas) para estimular los precios y aumentar el volumen de créditos de las entidades.

Asimismo, la entidad emisora, que había reconocido con anterioridad que la recesión económica, ha puesto de manifiesto su disposición a aumentar las obligaciones por encima del nivel actual, de 400.000 millones de yenes mensuales (603.207 millones de pesetas) "en caso de que sea necesario incrementar el suministro de liquidez en el mercado".

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Falta de confianza

Los expertos han insistido, sin embargo, en las pasadas semanas en que el problema de Japón no es que los que los tipos de interés estén demasiado altos, sino que no halla la forma de reactivar el consumo y la confianza de los usuarios.

En el último mes la economía japonesa no ha dejado de recibir malas noticias. Al anuncio de que el índice de producción industrial japonés cayó un 3,9% en enero, su mayor caída en seis años, se sumó la peor cifra de paro (el 4,9% de la población activa) desde la II Guerra Mundial. Por si fuera poco, coincidiendo con la publicación de este dato, el Gobierno nipón tuvo que enfrentarse al dato de inflación de enero, que arrojó una caída del IPC del 0,5%, con lo que repunta el fantasma de la deflación.

La nota positiva la puso el indicador avanzado de conyuntura sobre las condiciones a corto plazo de la economía, publicado el pasado día 7 y que puso de manifiesto una significativa mejora respecto al trimestre pasado. El Gobierno japonés anunció entonces que el índice, que se emplea como referencia para separar las fases de recesión de las de crecimiento, había registrado un incremento de 7,1 puntos en enero respecto al mes anterior, hasta situarse en 57,1 puntos.

AP