"Si el PNV apuesta por la soberanía, en el camino nos encontraremos"
Cuando a Maite Aristegi (Bergara, 1964) le comunicaron que ETA había declarado el cese de su actividad armada, se acordó "de los presos".
Pregunta. ¿Por qué aceptó ser cabeza de lista de Amaiur?
Respuesta. Estamos en un momento histórico, porque se abre una oportunidad para resolver definitivamente el conflicto político y lograr una pacificación justa. Para llegar a esta situación ha sido muy importante la conferencia de paz y la decisión de ETA de abandonar las armas. No podía dejar pasar esta ocasión. Y me decidí por Amaiur porque es una coalición de cuatro fuerza...
Cuando a Maite Aristegi (Bergara, 1964) le comunicaron que ETA había declarado el cese de su actividad armada, se acordó "de los presos".
Pregunta. ¿Por qué aceptó ser cabeza de lista de Amaiur?
Respuesta. Estamos en un momento histórico, porque se abre una oportunidad para resolver definitivamente el conflicto político y lograr una pacificación justa. Para llegar a esta situación ha sido muy importante la conferencia de paz y la decisión de ETA de abandonar las armas. No podía dejar pasar esta ocasión. Y me decidí por Amaiur porque es una coalición de cuatro fuerzas que ha dejado a un lado las diferencias y remarcar lo que les une.
P. No ha citado el papel de la sociedad vasca contra el terrorismo de ETA.
"La amnistía de los presos tiene que llegar. Y el perdón de ETA, también"
R. Es verdad, su papel ha sido importante. Lo ha reconocido incluso ETA en la última entrevista cuando decía que el nuevo contexto, el impulso de la sociedad le ha llevado a una reflexión que ha desembocado en un cambio de estrategia. Para nosotros es importante que ahora sólo hay sitio para las vías políticas.
P. ¿Cuál es el escenario de una pacificación justa?
R. Tiene que existir una voluntad de diálogo y consenso, dejando a un lado partidismos y la utilización de colectivos. Habrá que analizar las consecuencias del conflicto armado y eso corresponderá a ETA y al Estado. Me refiero al tema de las armas o los presos. Por otro lado, pese al abandono de ETA, el Gobierno mantiene su política penitenciaria, que es una forma de confrontación violenta sin respetar la legislación. Todo ese armamento del Estado debe callar. Y por otro lado está el reconocimiento de lo ocurrido. Se ha celebrado el Día de la Memoria y Bildu dio un paso al acudir a los actos. Habrá muchas lecturas sobre el pasado, pero tendremos que intentar ponernos en el lugar del otro y analizar todo el dolor que se ha generado a las víctimas. Tienen que darse pasos desde la verdad y la justicia. Amaiur va a dar todo de su parte para llegar a un escenario en el que todos podamos convivir.
P. ¿Y si sale un 55% a favor de la independencia? ¿Habría que llevarlo adelante?
R. No nos hemos puesto en ese escenario, pero habría que respetarlo. Se nos achaca de totalitaristas, cuando lo único que decimos es que se acepte la voluntad de los ciudadanos libremente expresada. No queremos poner ningún precio político, sino hacer lo que están haciendo en otros lugares. Nos dicen que las leyes impiden ejercer la soberanía, pero se pueden cambiar si así lo decide una mayoría.
P. Esa defensa de la soberanía ya la viene realizando Aralar en las instituciones.
R. Sí, claro. En Amaiur pensamos que ha llegado el momento de llegarlo a la práctica. Eso no se dará de un día para otro, porque tenemos enfrente un Estado que no acepta esa situación. Ya lo estamos viendo en esta campaña: no se acepta la plurinacionalidad de España. Si en estas elecciones hay 600.000 votos, o más, a favor del derecho a decidir de los vascos, ¿tampoco se van a mover?
P. ¿Ahí suma al PNV?
R. El PNV también defiende un nuevo estatus político. En el camino nos podríamos encontrar. Lo que hace falta es una gran mayoría a favor de la independencia.
P. ¿Estas elecciones se han planteado como una lucha PNV-Amaiur por la supremacía nacionalista?
R. No es nuestro objetivo. El PNV no es un enemigo. De hecho, se le planteó ir en coalición. Si el PNV apuesta por la soberanía en algún momento nos encontraremos.
P. ¿Y cómo observa la pelea Rubalcaba-Rajoy?
R. Son dos caras de la misma moneda. En el cara a cara televisivo zanjaron la cuestión vasca en medio minuto. Quieren hacer la política de la avestruz. Para ellos es el final, mientras que para nosotros es el inicio. Ahora, una mayoría absoluta del PP pondría las cosas muy difíciles. Yo solo les pido altura de miras.
P. ¿Cómo afronta Amaiur el hecho de ir a un Parlamento extranjero?
R. Madrid es una estación de paso, pero hay que estar allí para reivindicar la independencia de Euskal Herria. Seguro que encontraremos aliados desde otras naciones sin estado.
P. ¿Cuál será la primera iniciativa que van a plantear?
R. Lo que queremos es hacer relaciones, empatizar y dar a conocer nuestro proyecto, precisamente porque ha sido castigado y vilipendiado. Tenemos por delante un gran trabajo pedagógico.
P. ¿Amaiur apoya la amnistía de los presos?
R. Al final, paso a paso, habrá que llegar a eso.
P. Y respecto a las víctimas de ETA. ¿La banda terrorista debe pedir perdón?
R. También habrá que llegar a eso. Hay que abordar todo el sufrimiento que ha existido, por parte de ETA y por las fuerzas policiales del Estado.
P. Además de la reivindicación identitaria, ¿qué otras propuestas tienen?
R. Nos preocupa la crisis. En este sentido, la soberanía económica de Euskal Herria es vital para la propia supervivencia. El barco de Madrid hace aguas por el modelo del PP, del PSOE y la ayuda del PNV. Eso solo ha traído recortes y más pobreza. Se ha gobernado para los ricos. Aquí tenemos recursos para ser autosuficientes, siendo solidarios, por supuesto. Queremos tener las herramientas para gestionar nuestros recursos: un marco vasco de relaciones laborales, la caja de la seguridad social...