La Ertzaintza refuerza con oficinas móviles su vigilancia de las playas
La Ertzaintza desplegó ayer dispositivos especiales de vigilancia en 15 zonas de baño de los tres territorios, entre playas y pantanos, para garantizar la seguridad ante la aglomeración de personas. El aumento de la presencia policial, que se realizará a través de oficinas móviles, se mantendrá hasta el 15 de septiembre con el objetivo de atender denuncias que requieran una tramitación sencilla, como las motivadas por robos de carteras o documentación, y otros delitos menores. Además, los agentes cumplirán una función disuasoria e informarán de los servicios que prestan los ...
La Ertzaintza desplegó ayer dispositivos especiales de vigilancia en 15 zonas de baño de los tres territorios, entre playas y pantanos, para garantizar la seguridad ante la aglomeración de personas. El aumento de la presencia policial, que se realizará a través de oficinas móviles, se mantendrá hasta el 15 de septiembre con el objetivo de atender denuncias que requieran una tramitación sencilla, como las motivadas por robos de carteras o documentación, y otros delitos menores. Además, los agentes cumplirán una función disuasoria e informarán de los servicios que prestan los hondartzainak.
El plan especial de verano afectará a arenales como los vizcaínos de La Arena, Laida, Laga, Pedernales y San Antonio, o los guipuzcoanos de La Concha, Deba, Zumaia y Hondarribia.
La Ertzaintza redoblará también sus esfuerzos en las zonas de baño alavesas de Garaio y Landa, junto al embalse de Ullibarri-Gamboa, así como en más de una veintena de localidades de este territorio que, sin ser destino de bañistas, registran también en verano una importante afluencia de visitantes: Legutiano, Artziniega, Labastida o Bernedo, entre ellas.
El inicio de agosto y el buen tiempo reinante animaron ayer a miles de personas a visitar las distintas playas de Euskadi. La Concha donostiarra quedó abarrotada durante buena parte del día. El paso de las horas, sin embargo, fue dando paso a un incremento de la nubosidad que poco a poco contribuyó a ir despoblando los arenales. La jornada aguantó sin sobresaltos.
Para hoy está previsto un bochorno similar al de ayer, aunque la acumulación de nubes podría desencadenar chubascos tormentosos que incluso podrían llegar acompañados de granizo. La humedad elevará la sensación de calor. Las temperaturas mínimas subirán hasta un máximo de cinco grados, sobre todo en algunas zonas del interior, mientras que las máximas registrarán ligeros descensos.
Mañana, miércoles, la jornada se presenta algo más tranquila, con apertura de claros durante la tarde, aunque los termómetros mantendrán su descenso. Para el final de la semana se espera un ligero aumento de la nubosidad.