Erne amenaza con romper la negociación en la Ertzaintza y exige la implicación de Ares

La negociación laboral entre la Consejería de Interior y los sindicatos de la Ertzaintza no termina de cerrarse. Si hace un par de semanas todo parecía encaminado hacia un acuerdo, los últimos flecos del mismo han vuelto a provocar la distancia. Hasta el punto de que Erne, la central mayoritaria de la Policía vasca, planteó ayer a sus bases la posibilidad de una "ruptura técnica" ante la falta de encuentro.

La negociación, que ya se interrumpió el pasado año ante la cercanía de las elecciones sindicales, gira en torno a cuatro ejes estratégicos: el nuevo convenio, la segunda actividad p...

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La negociación laboral entre la Consejería de Interior y los sindicatos de la Ertzaintza no termina de cerrarse. Si hace un par de semanas todo parecía encaminado hacia un acuerdo, los últimos flecos del mismo han vuelto a provocar la distancia. Hasta el punto de que Erne, la central mayoritaria de la Policía vasca, planteó ayer a sus bases la posibilidad de una "ruptura técnica" ante la falta de encuentro.

La negociación, que ya se interrumpió el pasado año ante la cercanía de las elecciones sindicales, gira en torno a cuatro ejes estratégicos: el nuevo convenio, la segunda actividad por edad, el decreto de indemnizaciones y la carrera profesional horizontal. Ha sido en este último apartado donde han surgido las mayores discrepancias, al proponer Interior su implantación progresiva durante cinco años y no en dos, como se planteó en un inicio. Como trasfondo late la pretensión que el Gobierno vasco tiene de cerrar este mismo año un acuerdo sobre este asunto para el conjunto del funcionariado. Además, según Erne, la consejería ha retirado también algunas de las propuestas sobre las que "ya se había alcanzado un acuerdo previo", como en materia de vacaciones.

Consciente del peso que tiene en la negociación por su condición de mayoritaria, la central independiente demandó ayer la implicación en la misma del propio consejero, Rodolfo Ares. "Sin acuerdo podrán celebrar el Día de la Ertzaintza, pero nosotros no estaremos", advirtió ayer un portavoz del sindicato, quien dio una semana de plazo para reconducir las posturas y llegar a un entendimiento antes de agosto. De lo contrario, las conversaciones no se retomarían ya hasta después del verano "en el mejor de los casos". "Siempre existe la posibilidad de una ruptura definitiva por alguna de las dos partes", avisó.

Interior mantiene abierta la posibilidad de cerrar un acuerdo con alguna de las otras centrales agrupadas en la unidad de acción sindical (Esan, Sipe y Euspel), aunque es consciente de que sin Erne no solucionaría la conflictividad.

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