Columna

A ti, gaviota reidora

Entre los grandes espectáculos de la era política pedorra y posmoderna que vivimos en Madrid a derecha e izquierda destacan en mi youtube particular varios momentos. Cualquier comentario malicioso y a sonrisilla afilada de Espe, una buena tertulia de caverna mediática en la TDT, las chulerías toreras de Tomás Gómez, algún discurso somnífero y jurásico de los nuevos antilíderes de Izquierda Unida, la gravedad con labia y cara de circunstancias de Gallardón cuando se pone en el papel de modesto y entregado marianista, los coqueteos de Aznar con el aguirrismo para jeringar al líder que él ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Entre los grandes espectáculos de la era política pedorra y posmoderna que vivimos en Madrid a derecha e izquierda destacan en mi youtube particular varios momentos. Cualquier comentario malicioso y a sonrisilla afilada de Espe, una buena tertulia de caverna mediática en la TDT, las chulerías toreras de Tomás Gómez, algún discurso somnífero y jurásico de los nuevos antilíderes de Izquierda Unida, la gravedad con labia y cara de circunstancias de Gallardón cuando se pone en el papel de modesto y entregado marianista, los coqueteos de Aznar con el aguirrismo para jeringar al líder que él puso a dedo, la jeta de Granados tratando de justificar que no ha jugado a Mortadelo y Filemón...

Pero últimamente no hay nada que iguale a las intervenciones de Ana Botella. Su reciente recuento de la fauna del Manzanares ha sido realmente espectacular. Tiene el don innato de la repelencia ante los micrófonos, es incapaz de crear cualquier sintonía, ninguna complicidad con quien la escucha. Entona las frases de manera automáticamente antipática, forzada, tensa, antinatural. Eso sin contar que generalmente habla y habla pero no sabe lo que dice. De política no tiene idea, pero ya de medio ambiente no es que raye el ridículo, es que se mete de lleno en el esperpento.

Marzo de 2012. El PP gana las elecciones. Gallardón se ha colado en las listas del Congreso y salta a la política nacional. Rajoy le nombra ministro de algo que luzca: Fomento, que da lustre, incluso le hace vicepresidente o portavoz del Gobierno. Es muy posible, muy real. Y Ana que en su vida se vio en otra sustituye al pavo en la alcaldía. Esa es la gracia y la consecuencia siniestra que tuvo la jugadilla de este chico tan listo. Nos tragamos la broma de mal gusto los pobres vecinos de Madrid.

Habrá que pensar las consecuencias de un voto a Gallardón esta vez. Alcalde por unos meses, marrón general para cerca de cuatro años. Si esta mujer ha comprobado impasible como aumentaba la contaminación en la ciudad hasta límites irrespirables sin tomar ninguna medida, si aquí nuestra amiga da lecciones magistrales sobre la gaviota reidora y presume de especies sanas en un río que es un desagüe y si vamos a tener que soportar su impaciencia, su desprecio, su ignorancia, su soberbia, su descaro, que Dios, en su infinita misericordia, no asista.

La antipatía ha debido ser la más destacada cualidad de líder aprendida en su casa, prestando atención a la cara de palo de su marido. Da miedo. Pero sobre todo rabia porque está más que claro que una mujer de tan nulas cualidades para la vida pública jamás ganaría unas elecciones y por tanto ocupará un cargo usurpado a la voluntad de los votantes. Bonita manera de entender la democracia. Aunque estos días de cuaresma tan tendentes al remordimiento solo espero que al alcalde le entre mala conciencia después de tener que soportar los últimos éxitos en la red de su delfina. Pero no me hago ilusiones. Menuda condena.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En