El turismo salva la crisis aérea con una alta ocupación hotelera

El sector turístico de Euskadi está consiguiendo superar la prueba de la crisis aérea que se desató el pasado viernes, cuando la huelga salvaje de los controladores afectó de lleno al puente festivo más largo del año. Los hoteleros se muestran satisfechos, por lo general, y en las oficinas de turismo se agolpan los visitantes. "El fin de semana hemos estado a tope. Han venido muchos catalanes y madrileños", asegura una empleada de Turismo Bilbao.

Los establecimientos hoteleros de más alta calificación han registrado una alta ocupación, sin llegar al lleno, durante el arranque del puente...

El sector turístico de Euskadi está consiguiendo superar la prueba de la crisis aérea que se desató el pasado viernes, cuando la huelga salvaje de los controladores afectó de lleno al puente festivo más largo del año. Los hoteleros se muestran satisfechos, por lo general, y en las oficinas de turismo se agolpan los visitantes. "El fin de semana hemos estado a tope. Han venido muchos catalanes y madrileños", asegura una empleada de Turismo Bilbao.

Los establecimientos hoteleros de más alta calificación han registrado una alta ocupación, sin llegar al lleno, durante el arranque del puente de la Constitución. Lograron sobreponerse al desasosiego inicial que les causó el plante masivo de los controladores aéreos.

Las cancelaciones de vuelos regresan a los niveles de un día habitual

Vitoria ha completado todas las visitas guiadas programadas

Han comprobado que "algunas bajas por la falta de vuelos se han compensado con clientes que tuvieron que alargar su estancia" por el mismo motivo, explica un portavoz del Hotel Miró, un cuatro estrellas situado cerca del Museo Guggenheim, donde no han logrado ocupar todas sus habitaciones. "Está yendo peor de lo que esperábamos", reconoce dicho portavoz para resumir su actividad.

El Ercilla de Bilbao tampoco estaba ayer al 100%, pero se quedó muy cerca del lleno durante el fin de semana. Si no lo logró fue, según reconocen en este hotel también de cuatro estrellas, por el caos de los aeropuertos: "Algo nos ha afectado, sí", apunta un responsable.

El Codina de San Sebastián (tres estrellas) perdió el sábado la reserva de un grupo de Mallorca, lo que le impidió alcanzar la ocupación total. "El fin de semana ha habido mucho paso [de visitantes]. Ahora estamos al completo, aunque mañana bajamos al 70%", explica una responsable de este hotel. La mayoría de los establecimientos esperan mejorar los índices de ocupación con las reservas de última hora.

La vuelta a la normalidad en los aeródromos llevó la tranquilidad al sector turístico. Las únicas cancelaciones de vuelos registradas ayer fueron "las de un día habitual", ajenas al problema que generaron los controladores, según un portavoz de Aena. En los aeródromos de Loiu y Hondarribia tenían programadas 110 y 16 operaciones, respectivamente.

En las oficinas de Bilbao Turismo han estado "a tope" estos días. Muchos catalanes y franceses, también madrileños y valencianos, han elegido la capital vizcaína para disfrutar del puente. Un buen termómetro para pulsar la afluencia de visitantes suele ser la venta de la tarjeta de transporte BilbaoCard, que estos días "se ha disparado". Otro síntoma favorable fue la buena asistencia por la mañana al Guggenheim, según Bilbao Turismo. En esta ciudad apenas había plazas libres en las pensiones y sólo los hoteles más lujosos ofrecían algunas habitaciones libres.

En Vitoria también se constató "mucho movimiento" durante todo el fin de semana. Las oficinas de turismo lograron completar las visitas guiadas que ofrecen para conocer todo el Casco Medieval o para cubrir la ruta de las cuatro iglesias-monumento de la ciudad. "Es un turismo principalmente nacional", informaron trabajadores de la central turística de la capital alavesa, donde consideran que todavía es pronto para hacer un balance de este periodo festivo.