"Eres un 'gudari' de mierda. Te vamos a matar"
Los etarras Portu y Sarasola declaran que fueron torturados
"Me dieron patadas en las costillas, en el vientre, en las piernas. Me metieron la cabeza en el agua dos o tres veces. Me quedé sin respiración". El etarra Igor Portu detalló ayer ante un tribunal las palizas y amenazas que, según él, recibió de los guardias civiles que le custodiaron tras su detención en enero de 2008 junto a su compañero Mattin Sarasola.
Portu y Sarasola, condenados a 1.040 años por el atentado de la T-4 de Barajas, se ratificaron en que fueron torturados y amenazados de muerte por los agentes acusados. La Audiencia de Guipúzcoa juzga a 15 guardias civiles por este as...
"Me dieron patadas en las costillas, en el vientre, en las piernas. Me metieron la cabeza en el agua dos o tres veces. Me quedé sin respiración". El etarra Igor Portu detalló ayer ante un tribunal las palizas y amenazas que, según él, recibió de los guardias civiles que le custodiaron tras su detención en enero de 2008 junto a su compañero Mattin Sarasola.
Portu y Sarasola, condenados a 1.040 años por el atentado de la T-4 de Barajas, se ratificaron en que fueron torturados y amenazados de muerte por los agentes acusados. La Audiencia de Guipúzcoa juzga a 15 guardias civiles por este asunto. La acusación particular solicita penas de seis a 17 años de prisión y el fiscal pide cárcel (hasta tres años) para cuatro de ellos.
Los dos terroristas dijeron que no ofrecieron resistencia durante el arresto y tampoco trataron de huir, en contra de lo que aseguraron los procesados la víspera. Portu afirmó que la intensidad de los malos tratos aumentó cuando le trasladaron junto a un río poco después de la detención. Allí, con "mucha violencia y agresividad", Portu recordó que le gritaban "eres un gudari [soldado] de mierda; te vamos a matar". En el cuartel de Intxaurrondo, dijo, le agarraron de los testículos y recibió numerosos golpes, lo que puso en conocimiento de los médicos que le atendieron en la clínica forense y en la UCI.
Sarasola relató que le llevaron a una pista forestal, pero no vio ningún río. Dijo que recibió puñetazos y patadas, le pusieron la pistola en la sien y amenazaron con matar a su hermano. Añadió que no denunció en un primer momento estos hechos "por miedo".