Italia y Países Bajos suplen la caída en julio del turismo británico

El turismo británico, principal cliente, sobre todo, de la Costa Blanca, sigue mirando con apatía hacia la Comunidad Valenciana. La llegada de visitantes británicos bajó un 11% el pasado mes de julio. Pese a ello, fuentes empresariales destacan que la caída es menos brusca que la del año pasado. Y la Consejería de Turismo apunta a que el mercado británico está en recuperación. La caída de este cliente, en cualquier caso, se produce a pesar de que en el conjunto del país registró un repunte del 1%. Pese a ello, el descenso, que se suma también a la mala evolución del visitante francés, logró se...

El turismo británico, principal cliente, sobre todo, de la Costa Blanca, sigue mirando con apatía hacia la Comunidad Valenciana. La llegada de visitantes británicos bajó un 11% el pasado mes de julio. Pese a ello, fuentes empresariales destacan que la caída es menos brusca que la del año pasado. Y la Consejería de Turismo apunta a que el mercado británico está en recuperación. La caída de este cliente, en cualquier caso, se produce a pesar de que en el conjunto del país registró un repunte del 1%. Pese a ello, el descenso, que se suma también a la mala evolución del visitante francés, logró ser compensado por el repunte de los turistas procedentes de Italia y los Países Bajos, según el último informe de Frontur que publica el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Portugal es el tercer cliente de Benidorm y Argelia un mercado incipiente

La Comunidad Valenciana recibió el pasado mes de julio 711.766 turistas internacionales, lo que supone un aumento del 0,5% sobre ese mes de 2009.El crecimiento en la llegada de turistas no solo fue discreto (0,5%), sino que estuvo muy por debajo de la media de España (4,5%) y a distancia de los datos logrados por las restantes autonomías costeras. A pesar de todo ello, el crecimiento en la llegada de turistas en julio fue el primero que se registra en ese mes desde el año 2007, según los datos históricos que maneja Frontur.

La Consejería de Turismo y los empresarios hoteleros recordaron ayer que hay otros mercados que están ganando terreno en la Comunidad Valenciana. Así, el departamento que dirige Belén Juste destacó el crecimiento del turista estadounidense o del suizo.

La patronal hotelera de Benidorm y Costa Blanca (Hosbec) también ha detectado cómo en los últimos años el visitante portugués se ha consolidado como el tercer gran cliente de Benidorm, por detrás del turismo nacional y del mercado británico y pese a su debilidad. El presidente de Hosbec, Antoni Mayor, también destaca como tendencia el crecimiento incipiente del mercado argelino. El país norteafricano se encuentra a 250 kilómetros de la costa alicantina y entre ambos puntos hay conexión marítima diaria y también rutas aéreas.

El turista llega principalmente vía aérea y a través de L'Altet. El aeropuerto alicantino recibió a más del 52% de estos turistas (370.581), un 0,6% más. El principal crecimiento, sin embargo, se ha producido en el aeropuerto de Manises, que ha visto incrementadas sus conexiones internacionales. Manises registró un 65,2% más de turistas extranjeros que el año pasado. Este es, de hecho, uno de los motivos a los que los hoteleros de Valencia atribuyen que la provincia de Valencia haya logrado incrementar la ocupación del mes de julio en un 14%.

En julio el sector turístico logró un resultado en líneas generales ligeramente superior al de 2009, a pesar de que esta campaña turística ha sido más incierta que otros años por la crisis y porque se acusa la tendencia a reservar a última hora. Los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) inciden en esta línea. Los hoteles valencianos 2.945.899 pernoctaciones durante el pasado mes de julio, lo que supone un incremento del 2,6% que el año pasado. La Comunidad fue el cuarto destino español con más ocupación (67,19%), por detrás de Baleares (85,8%), Canarias (70,2%) y Cataluña (69,8%).

Eso sí, se agudiza la crisis de rentabilidad que sufre el sector empresarial que en julio bajó de nuevo los precios una media del 2% sobre el año anterior y del 1,1% en comparación con el mes precedente. Este esfuerzo es superior al de la media española.El descenso de los precios se refleja también en los llamados Indicadores de Rentabilidad del Sector Hotelero (IRSH), que evidencia que en la Comunidad Valenciana ésta bajó un 0,4% solo el mes pasado. Y el retroceso, además, se produce en un contexto de subida de la rentabilidad de un 1,2% en el conjunto de España. La caída de la rentabilidad es el principal problema que sufren los empresarios turísticos valencianos.