El PP vuelve a cuestionar la política del Gobierno con los presos de ETA

Iturgáiz alude a unas palabras de Brian Currin para decir que hay negociación

El PP volvió a cuestionar ayer la política antiterrorista del Gobierno en relación con los presos de ETA. Unas declaraciones delabogado sudafricano Brian Currin, que ejerce unilateralmente como mediador de la izquierda radical vasca, dieron pie a que el eurodiputado Carlos Iturgáiz afirmara que "existe un proceso de negociación abierto" entre el Ejecutivo y la banda terrorista, "con mediadores internacionales de por medio".

Currin había declarado a la agencia Europa Press que los beneficios aplicados por el Gobierno a los presos disidentes de ETA "pueden ser un factor importante que pue...

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El PP volvió a cuestionar ayer la política antiterrorista del Gobierno en relación con los presos de ETA. Unas declaraciones delabogado sudafricano Brian Currin, que ejerce unilateralmente como mediador de la izquierda radical vasca, dieron pie a que el eurodiputado Carlos Iturgáiz afirmara que "existe un proceso de negociación abierto" entre el Ejecutivo y la banda terrorista, "con mediadores internacionales de por medio".

Currin había declarado a la agencia Europa Press que los beneficios aplicados por el Gobierno a los presos disidentes de ETA "pueden ser un factor importante que puede ayudar a avanzar el proceso". Se refería a la iniciativa que impulsa junto a otros para, en primer término, arrancar un alto el fuego permanente a la banda terrorista, y que ahora atraviesa "un punto muy delicado".

Carlos Iturgáiz (presidente del PP vasco entre 1996 y 2004) afirmó que las declaraciones de Currin, además de confirmar, a su juicio, una supuesta negociación con la banda, son "una humillación y una bofetada" a las víctimas del terrorismo etarra. En esa misma línea se pronunció en julio el también eurodiputado y ex líder vasco Jaime Mayor Oreja. El lehendakari, Patxi López, defendió el lunes esa política penitenciaria, aunque mostró su comprensión por el rechazo que suscita en algunas víctimas. Horas después, la diputada regional Laura Garrido, portavoz estos días del PP vasco, calificaba de "muy arriesgada" la iniciativa.

Ante una posible traición

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, avisó por su parte que en el PP seguirán "muy vigilantes", pues guardan "en la memoria" la "negociación política" de 2006. Ha recalcado además la "preocupación" que despertó en su partido que José Luis Rodríguez Zapatero viera un "acierto" el proceso porque "sembró una solución definitiva". Por todo ello, y como ya hizo su líder, Mariano Rajoy, insistió ayer en pedir al Gobierno que explique a la ciudadanía su política penitenciaria.

Cospedal aludió también al acuerdo que el PP mantiene con los socialistas en el País Vasco, "el más generoso que se recuerda en democracia", ante las tensiones que pueda suponer un posible pacto del PSOE con el PNV en Madrid sobre los Presupuestos Generales del Estado: "Si pretende traicionar esos acuerdos, serán ellos los que los rompan".

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Esta negociación ha activado alertas en ambas orillas. El presidente popular vasco, Antonio Basagoiti, instó a Rajoy a que sea el PP y no el PNV quien respalde al PSOE. El líder nacionalista, Iñigo Urkullu, le respondió, irritado, que está agrietando el intento de acercamiento mutuo.

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