Una demolición sin licencia llena de escombros el centro del puerto vigués

El empuje de Corina Porro, presidenta de la Autoridad Portuaria de Vigo, para dotar al puerto de mayor funcionalidad y vistosidad está teniendo el efecto opuesto de sembrarlo de escombros: los del relleno paralizado en el muelle de Areal y, desde ayer, en el muelle de Trasatlánticos, los de una nave demolida para construir en el solar una espectacular fuente que, según el proyecto, contribuiría a una mayor integración puerto-ciudad y animaría a los cruceristas a pisar tierra. El resultado inicial, sin embargo, añade más leña al horno de la confrontación política de la presidenta portuaria y lí...

El empuje de Corina Porro, presidenta de la Autoridad Portuaria de Vigo, para dotar al puerto de mayor funcionalidad y vistosidad está teniendo el efecto opuesto de sembrarlo de escombros: los del relleno paralizado en el muelle de Areal y, desde ayer, en el muelle de Trasatlánticos, los de una nave demolida para construir en el solar una espectacular fuente que, según el proyecto, contribuiría a una mayor integración puerto-ciudad y animaría a los cruceristas a pisar tierra. El resultado inicial, sin embargo, añade más leña al horno de la confrontación política de la presidenta portuaria y líder local del PP con el gobierno municipal y, singularmente, con el alcalde, el socialista Abel Caballero.

"Tiene un interés especial en paralizar todo", se queja la presidenta portuaria

"En 129 años no hubo que pedir licencia, pero ahora tienen un interés especial en paralizar absolutamente todo", lamentaba ayer Porro, tras chocar con un rigor normativo que sus asesores parecen haber desdeñado, tanto en el asunto del relleno como en el de la fuente cibernética. "Yo cumplo la ley; si la Abogacía del Estado me dice que pare, paro", adujo.

La demolición de la nave de cableros, en cuyo solar está proyectada la fuente, comenzó el viernes por la noche. El sábado el Ayuntamiento ordenó paralizar las obras por carecer de licencia, pero en el puerto nadie quiso recibir la notificación ni se dio por enterado, hasta ayer por la mañana, en que se solaparon las actuaciones de ambas administraciones: a las 9.45 horas Porro ordenó la paralización y a las 11, el Ayuntamiento resolvió eso mismo y el precintado de las obras, "tras constatar que continuaban" a primera hora de la mañana, según José Mariño, concejal de Urbanismo.

La obra, según Porro, forma parte del conjunto de urbanización proyectado para el muelle de Trasatlánticos, se adecúa al Plan Especial del Puerto y no requiere licencia municipal por su vinculación a la actividad portuaria. "Todos los informes señalan que las obras cumplen la normativa vigente", asegura.

Porro recordó que Caballero, quería construir, en el mismo solar, 12.000 metros cuadrados en 10 edificaciones de tres plantas, dentro del Plan Nouvel que promovió como presidente de la Autoridad Portuaria y que ella descartó al acceder al mismo cargo. "No quieren entender que yo tengo otro proyecto", explicaba ayer, "y que mis proyectos no se van a quedar en maquetas, como los suyos". Los de Caballero costaron 2,3 millones sólo por publicitarlos, igual casi que la construcción de la espectacular fuente (2,6 millones). Pero desde el ayuntamiento se ven las cosas de otra manera.

Santiago Domínguez, teniente de alcalde nacionalista, volvió a recriminar a Porro que promueva en el puerto actuaciones al margen de la ley por sus "excesivas prisas" en disponer de resultados que avalen su candidatura a la alcaldía en las próximas elecciones municipales.

El concejal de Urbanismo, José Mariño, señaló que a mediados de noviembre, cuando la obra de la fuente se licitó, ya se comunicó desde el ayuntamiento a la Autoridad Portuaria que las obras serían ilegales. "Aún no han contestado", afirmó Mariño, expresando cierta sorpresa por que sólo ahora se expresaran desde el puerto deseos de diálogo. En cualquier caso, será un diálogo forzado por recíprocas amenazas jurídicas: de recurrir al juzgado para anular la decisión municipal, por parte de la Autoridad Portuaria, y, por parte municipal, de denunciar al fiscal el incumpliento de las resoluciones si no hay una paralización efectiva de las obras. "No nos apartaremos ni un milímetro de la defensa de la legalidad", aseguró Mariño, que ayer mismo aceptó entrevistarse con el director del puerto, Luis Lara, para tratar el asunto.

El concejal calificó de "hecho gravísimo" que se desoyera la orden de paralización de las obras e instó a la Autoridad Portuaria a cumplir la ley "exactamente igual" que el resto de administraciones y ciudadanos. Las obras que Porro quiere acometer en el puerto, según Mariño, precisan modificar el Plan Especial, lo cual no será posible sin la previa aprobación del Plan de Utilización de los Espacios Portuarios, el denominado plan de usos, cuya evaluación ambiental se tramita ahora en el Ministerio de Medio Ambiente. Esa exigencia dejaría a Porro muy poco margen de calendario.

El litigio del puerto focaliza la drástica confrontación que socialistas y populares mantienen en relación con el futuro de las cajas. Para la presidenta portuaria, la manifestación de hoy que abandera el alcalde "es una parte más de su forma de actuar: mentir, manipular, engañar a la ciudadanía para obtener un puñado de votos, de eso es capaz Abel Caballero", dijo.