La crisis elevó un 79,6% los concursos de acreedores
El reguero de malas noticias que ha dejado 2009 en materia económica volvió a arrojar ayer datos desalentadores: durante el año pasado se declaró en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) más del doble de familias que en 2008, y en ese mismo periodo el número de empresas aumentó en un 72,2%. El Instituto Nacional de Estadística (INE) cifró en 5.922 los deudores concursados, un incremento global del 79,6% respecto al año anterior. En total, 938 familias y 4.984 empresas (personas físicas con actividad empresarial y personas jurídicas).
Los procedimientos concursales volunta...
El reguero de malas noticias que ha dejado 2009 en materia económica volvió a arrojar ayer datos desalentadores: durante el año pasado se declaró en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) más del doble de familias que en 2008, y en ese mismo periodo el número de empresas aumentó en un 72,2%. El Instituto Nacional de Estadística (INE) cifró en 5.922 los deudores concursados, un incremento global del 79,6% respecto al año anterior. En total, 938 familias y 4.984 empresas (personas físicas con actividad empresarial y personas jurídicas).
Los procedimientos concursales voluntarios (por los cuales familias y empresas abren un proceso para renegociar con sus acreedores) aumentaron en un 81% el año pasado, y los necesarios lo hicieron en un 48,1%.
Las regiones con mayor número de procedimientos fueron Cataluña (1.413), Madrid (878), Comunidad Valenciana (808) y Andalucía (623), que concentraron el 62,9% del total. La Rioja (47), Extremadura (61) y Comunidad Foral de Navarra (64) fueron las menos afectadas.
La construcción se mantiene como mascarón de proa de la crisis: de las 4.984 empresas concursadas, 1.671 pertenecen al sector inmobiliario. Le sigue industria y energía y comercio.
Las situaciones de quiebra se cebaron con las empresas pequeñas. El 62,3% de los concursos se concentró en las de menor volumen de negocio (menos de dos millones de euros). En dicho tramo cayeron todos los autónomos, el 65,6% de las sociedades limitadas y el 39,8% de las anónimas.
De las empresas concursadas, un 8% no tenía asalariados, un 38,1% de 10 a 49 y sólo un 3,7% superaba los 100 empleados. Desde la aparición de la Ley Concursal de 2004, 232.570 trabajadores se han visto afectados.