Olivar y frutas, los cultivos más dañados

La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha cifrado en 855 millones los primeros daños del temporal en el campo y en las infraestructuras agrarias. Las mayores pérdidas, según el informe presentado ayer por el secretario regional de esta organización, Agustín Rodríguez, se han dado en los sectores hortícolas y del olivar, con más de 600 millones entre los dos.

Rodríguez señaló que se ha perdido ya el 15% de la producción oleícola (unas 150.000 toneladas) por el encharcamiento de los olivos, mientras que en la costa Tropical se ha perdido en torno al 80% de la producción de cultivos hortí...

La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha cifrado en 855 millones los primeros daños del temporal en el campo y en las infraestructuras agrarias. Las mayores pérdidas, según el informe presentado ayer por el secretario regional de esta organización, Agustín Rodríguez, se han dado en los sectores hortícolas y del olivar, con más de 600 millones entre los dos.

Rodríguez señaló que se ha perdido ya el 15% de la producción oleícola (unas 150.000 toneladas) por el encharcamiento de los olivos, mientras que en la costa Tropical se ha perdido en torno al 80% de la producción de cultivos hortícolas bajo abrigo. El 80% de la producción de fresa temprana en Huelva y el 20% de la cosecha de naranjas en la Vega del Guadalquivir son otros daños del temporal.

Por lo demás, las fuertes lluvias han producido daños de más de 60 millones en los caminos agrícolas y en vías pecuarias. Según Rodríguez, se han producido caídas de muros, cárcavas, bancales dañados, vallados arrastrados y daños en corrales, así como en las estructuras de invernaderos y de microtúneles. Como aspectos positivos, la UPA valora que el agua embalsada garantiza las dos próximas campañas de riego en la agricultura, así como la vuelta de los pastos a las dehesas en beneficio de la cabaña ganadera.

Rodríguez, quien anunció que se remitirá a la Consejería de Agricultura el informe de pérdidas elaborado por UPA, exigió a la Junta la implantación de un Plan Andaluz de Caminos Rurales (cuyo coste ascendería a 60 millones de euros) para reparar todos los accesos a las explotaciones agrícolas que aún permanecen cortados por los efectos del temporal.

Planteó también una revisión de la política de seguros agrarios debido a la escasa cobertura que, según él, prestan y a la poca contratación -que ha cuantificado en un 8% del total de explotaciones- que actualmente representan en la actividad agraria andaluza. A pesar de todo, Rodríguez valoró los efectos beneficiosos que las lluvias de las últimas semanas han tenido sobre los embalses y acuíferos.