Análisis:DESDE EL PARQUÉ | Mercados

Los inversores rehúyen el riesgo

La Bolsa española se mueve con mucha prudencia en la zona de máximos anuales, hasta el punto de que el Ibex 35 apenas osciló el 1% entre los niveles máximo y mínimo de la sesión.

Al cierre, el principal índice de la Bolsa española subió el 0,06%, una cantidad mínima, pero que le permite conseguir el segundo cierre en importancia de este año por segundo día consecutivo, esta vez en 9.714,40 puntos.

La actividad y el mayor interés de los inversores continúan centrados en torno a los grandes valores del mercado, muchos de los cuales cotizarán desde el próximo lunes con tres decimale...

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La Bolsa española se mueve con mucha prudencia en la zona de máximos anuales, hasta el punto de que el Ibex 35 apenas osciló el 1% entre los niveles máximo y mínimo de la sesión.

Al cierre, el principal índice de la Bolsa española subió el 0,06%, una cantidad mínima, pero que le permite conseguir el segundo cierre en importancia de este año por segundo día consecutivo, esta vez en 9.714,40 puntos.

La actividad y el mayor interés de los inversores continúan centrados en torno a los grandes valores del mercado, muchos de los cuales cotizarán desde el próximo lunes con tres decimales, lo que puede limitar los recorridos tanto al alza como a la baja, al igual que ya ha sucedido con otros valores más pequeños. Hay, sin embargo, una pequeña diferencia entre unos y otros, y es que para los valores más grandes las oscilaciones mínimas se establecen en 0,005 euros, es decir, en medio céntimo, mientras que para los más pequeños es de 0,001 euros.

La relativa inestabilidad de la Bolsa española coincide con una situación similar en Nueva York, cuyo principal índice encuentra demasiados problemas para superar el nivel de apertura del ejercicio, los 8.776,39 puntos que, al igual que en el Ibex 35, sólo se mejoró en los primeros días del año. En los últimos días ha tocado ese nivel en un par de ocasiones, pero la presión del papel termina siempre por devolverle a zonas más bajas.

La Bolsa de Nueva York se mantenía ayer en una zona neutra, a pesar de que se contó con un par de datos medianamente positivos. Los precios de los bienes importados subieron en mayo en Estados Unidos el 1,3% como consecuencia de la subida del precio del petróleo, lo que aleja el miedo a la deflación, pero crea una peligrosa dependencia para el IPC respecto de las evoluciones del precio del crudo. El otro dato se refería a los índices anticipados de la primera semana de junio, que apuntan a la proximidad del final de la recesión, al igual que el dato de conjunto del mes de mayo.

En cuanto a la contratación en el Mercado Continuo, la cifra total logró superar los 2.000 millones de euros, aunque las operaciones del mercado abierto cayeron hasta los 1.560,28 millones de euros, cifra cercana al mínimo anual.

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