Alta cocina

Los medios de comunicación nos brindan un caudal constante de información acerca de los reconocidos creadores o artistas de la denominada "alta cocina" y de sus maravillosas elaboraciones que difícilmente puede pasar desapercibida. Quien inmerso en determinados foros o ambientes confiese desconocer los nombres de las estrellas de los fogones o insinúe cierto desinterés por sus obras culinarias podrá ser acribillado por miradas de escepticismo y, posiblemente, relegado al gueto de los burdos. Plástica de los sentidos, universo de sabores y texturas, sensaciones insólitas o elaboraciones metafór...

Los medios de comunicación nos brindan un caudal constante de información acerca de los reconocidos creadores o artistas de la denominada "alta cocina" y de sus maravillosas elaboraciones que difícilmente puede pasar desapercibida. Quien inmerso en determinados foros o ambientes confiese desconocer los nombres de las estrellas de los fogones o insinúe cierto desinterés por sus obras culinarias podrá ser acribillado por miradas de escepticismo y, posiblemente, relegado al gueto de los burdos. Plástica de los sentidos, universo de sabores y texturas, sensaciones insólitas o elaboraciones metafóricas son algunos de los términos utilizados para describir las obras de arte que, desgraciadamente, sólo son apreciadas y disfrutadas por el paladar de una pequeña parte de la ciudadanía. No estaría nada mal que se instalaran galerías o museos donde, por un módico precio, la población pudiera compartir y saborear las exquisiteces de esta expresión cultural y así entender su melódica poesía. Mientras tanto, ¡una rústica tortilla.