Foz ya puede edificar tras dos años de suspensión

Dos años de consenso imposible para concretar un Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) en el Ayuntamiento de Foz hicieron que concluyera el plazo de suspensión cautelar de licencias urbanísticas. A partir de hoy, se acaba el veto a la construcción. Edificar en este municipio de la costa de Lugo será posible a través de unas normas subsidiarias que datan de 1981 y vuelven a tener vigencia provisional.

El Ayuntamiento de Foz fue de los primeros de la costa lucense que intentó actualizar su planeamiento urbanístico, pero en el camino se dio de bruces con la polémica, cuando la Consel...

Dos años de consenso imposible para concretar un Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) en el Ayuntamiento de Foz hicieron que concluyera el plazo de suspensión cautelar de licencias urbanísticas. A partir de hoy, se acaba el veto a la construcción. Edificar en este municipio de la costa de Lugo será posible a través de unas normas subsidiarias que datan de 1981 y vuelven a tener vigencia provisional.

El Ayuntamiento de Foz fue de los primeros de la costa lucense que intentó actualizar su planeamiento urbanístico, pero en el camino se dio de bruces con la polémica, cuando la Consellería de Política Territorial, dirigida entonces por María José Caride, instó al ente local a anular 40 licencias para construir 1.350 viviendas. Los permisos se habían otorgado por la misma normativa que hoy vuelve a estar vigente, y, según la consellería, eran contrarios a la ley porque se concedieron después de que el pleno municipal acordase suspender las licencias de edificación.

Fallos judiciales

El alcalde, el socialista José María García Rivera, siempre se opuso a este requerimiento de Política Territorial. Continuó adelante con las licencias y, de momento, los primeros pronunciamientos judiciales le han dado la razón. Los fallos conocidos argumentan que no había motivos para una suspensión cautelar de las licencias, como pretendía el departamento de Caride.

Rivera gobierna en minoría y, tras dos años, no ha sido capaz de lograr un punto de encuentro con la oposición (PP y BNG) ni tampoco con un grupo de vecinos que considera el PGOM que se está tramitando demasiado restrictivo. "Yo cumplí y presenté un plan, pero lo ralentizaron desde la oposición solicitando la creación de grupos de trabajo y así se ha llegado al levantamiento de la suspensión de licencias", afirma el alcalde.

El Ayuntamiento solicitó el pasado miércoles a la nueva Consellería del Territorio que regule el otorgamiento de las licencias que puedan solicitarse desde hoy y que lo haga de una forma "restrictiva" para que no entren en colisión con el documento que se tramita en la actualidad. "Queremos una regulación al igual que se hizo en otros municipios como Viveiro o Sada", explica el alcalde. El BNG considera "esperpéntico" que se haya llegado a esta situación, de la que Rivera no se considera culpable.