Reportaje:Los actores toman la calle por un día

Sobre un escenario de asfalto

Nueve horas de espectáculos en la largamadrugada de la Noche de los Teatros

"El teatro es la verdad escondida", afirmará esta tarde Javier Veiga al leer el manifiesto del Día Mundial del Teatro. Será en la plaza de Vázquez de Mella, a las cinco y media, dentro del abanico de actividades que toman hoy las calles de Madrid. Durante nueve horas, la tercera edición de la Noche de los Teatros saca esa verdad al descubierto. Porque, según el manifiesto, "todos somos artistas".

Francisco Nieva dará el pregón, a las cinco, de esta fiesta del teatro. A partir de ahí, 170 actividades en 107 espacios diferentes con más de 200 artistas. Para todos los gustos. Todo para sup...

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"El teatro es la verdad escondida", afirmará esta tarde Javier Veiga al leer el manifiesto del Día Mundial del Teatro. Será en la plaza de Vázquez de Mella, a las cinco y media, dentro del abanico de actividades que toman hoy las calles de Madrid. Durante nueve horas, la tercera edición de la Noche de los Teatros saca esa verdad al descubierto. Porque, según el manifiesto, "todos somos artistas".

Francisco Nieva dará el pregón, a las cinco, de esta fiesta del teatro. A partir de ahí, 170 actividades en 107 espacios diferentes con más de 200 artistas. Para todos los gustos. Todo para superar los 100.000 espectadores que, según la organización, tuvo la edición del año pasado. Esta edición, con un presupuesto de 400.000 euros, dura una hora más y sale de la capital, con actos en 12 municipios.

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Las salas convencionales ofrecen descuentos de hasta el 50%, las exposiciones amplían sus horarios, y la música y el cine también ponen su granito de arena para honrar al teatro. Pero quizá lo más llamativo es que el teatro sale a la calle. Tras la lectura del manifiesto, escrito por el dramaturgo brasileño Augusto Boal, la plaza de Vázquez de Mella se convierte en escenario de piezas cortas de teatro, danza y música. A la misma hora, y en el patio del Centro Cultural Galileo, los niños son protagonistas con el taller infantil de títeres.

A pocos metros de la plaza, jóvenes creadores toman la calle de Fuencarral a partir de las seis: 120 minutos y 20 espectáculos, de entre 10 y 15 minutos, en seis escenarios distribuidos a lo largo de la calle, entre Quevedo y Bilbao. Todo tipo de performances con la participación del público. Para muchos de los actores, alumnos de escuelas y talleres de teatro, será su primera actuación con público. También a las seis, el jazz animará la plaza del Carmen, donde se podrán comprar entradas para todos los espectáculos de la jornada.

A las siete y media, el espectáculo La cama muestra el intento de Adrian Schvarstein de crear su hogar ideal. A las ocho, Suso33 dibuja sobre la fachada del Instituto Cervantes. Media hora después, las luces y sombras del barroco toman la calle de Bravo Murillo, con una cabalgata de la compañía Morboria. Los integrantes de Fiebre del sábado noche saldrán a las puertas del teatro Coliseum a las siete, y el equipo de Mayumaná ofrecerá una jam session en la plaza de Tirso de Molina al finalizar su espectáculo Momentum, sobre las diez de la noche.

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El teatro toma las calles, como si fuera "una fiesta de la cosecha". De esto trata, para el actor Javier Veiga, esta especie de "huelga a la japonesa" para celebrar que el teatro "va bien". "Estamos muy contentos de no notar la crisis", afirma el actor. El manifiesto que leerá hoy sí que recuerda la crisis real. Habla de "un mal enredo, donde pocos ganaban mucho y muchos perdían todo". Buen día el de hoy para olvidarlo.

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