El mercado aguanta la presión vendedora
Los mercados de valores vivieron ayer una sesión turbulenta en la que resultó casi imposible definir una tendencia común. Las ganancias acumuladas en las cinco sesiones anteriores parecían pedir a gritos un ajuste de las cotizaciones, sobre todo cuando muchos analistas pronostican esa posibilidad para que el mercado pueda crear un suelo estable.
El Ibex 35 fue uno de los pocos índices europeos que salió bien parado de los constantes escarceos entre los escasos compradores y vendedores que actúan en el mercado, con lo que al final de la sesión subió el 0,11% y se mantiene por encima de l...
Los mercados de valores vivieron ayer una sesión turbulenta en la que resultó casi imposible definir una tendencia común. Las ganancias acumuladas en las cinco sesiones anteriores parecían pedir a gritos un ajuste de las cotizaciones, sobre todo cuando muchos analistas pronostican esa posibilidad para que el mercado pueda crear un suelo estable.
El Ibex 35 fue uno de los pocos índices europeos que salió bien parado de los constantes escarceos entre los escasos compradores y vendedores que actúan en el mercado, con lo que al final de la sesión subió el 0,11% y se mantiene por encima de los 7.600 puntos.
La ausencia de órdenes de venta importantes fue una de las sorpresas de esta sesión, en la que la inversión a corto esperaba un importante reajuste de las cotizaciones. Uno de los argumentos que se esgrimían días atrás para justificar algunas subidas de precios era el de la entrada de inversores "finales" en unos cuantos valores escogidos, algo que en su momento no se creyó del todo, pero que ayer alcanzaba un alto grado de probabilidad ante la resistencia de muchos valores.
A última hora del día crecieron las dudas pues, si bien no salía mucho papel, tampoco el dinero aparecía en cantidades importantes. En esos minutos finales de la sesión empezaba a pesar el ambiente de dudas que se vivía en la Bolsa de Nueva York, también presa de numerosos altibajos.
La relativa resistencia de los valores bancarios en torno a los cierres anteriores, junto con la estabilidad de las compañías eléctricas y de Telefónica permitieron un cierre tranquilo, mientras que el contraste negativo lo ponía Gas Natural, cuyas acciones están resultando muy castigadas tras el inicio de la ampliación de capital. Las acciones de Gas Natural cayeron el 7,70%, aunque en los peores momentos del día llegaron a perder el 10,13%. Los derechos de suscripción tampoco son muy buscados por los inversores, por lo que cerraron la sesión con un recorte del 46,54%, después de perder hasta el 59,11%.
La contratación en el Mercado Continuo se mantuvo casi en los mismos niveles que el día anterior, con 2.262,15 millones de euros. Las operaciones del "mercado abierto" continúan estancadas en torno a los 2.000 millones de euros.