Camps condicionó su entrevista con Alarte al voto del PSPV a Cholbi

El presidente de la Generalitat llamó el pasado jueves por la noche a Ricardo Costa, portavoz del grupo parlamentario y secretario general del PP, para que transmitiera a la dirección socialista la conveniencia de votar a José Cholbi como Síndic de Greuges en el pleno del pasado jueves, en el que se votaron los presupuestos de la Generalitat. A cambio, el presidente se comprometía a recibir de inmediato a Jorge Alarte, secretario general del PSPV. Fuentes socialistas narraron a este periódico que el pasado jueves, durante la cena de los diputados de las Cortes Valencianas, Costa recibió una ll...

El presidente de la Generalitat llamó el pasado jueves por la noche a Ricardo Costa, portavoz del grupo parlamentario y secretario general del PP, para que transmitiera a la dirección socialista la conveniencia de votar a José Cholbi como Síndic de Greuges en el pleno del pasado jueves, en el que se votaron los presupuestos de la Generalitat. A cambio, el presidente se comprometía a recibir de inmediato a Jorge Alarte, secretario general del PSPV. Fuentes socialistas narraron a este periódico que el pasado jueves, durante la cena de los diputados de las Cortes Valencianas, Costa recibió una llamada a su teléfono móvil y, tras ausentarse unos minutos, propuso el intercambio de votos por entrevista.

Ricardo Costa y Ángel Luna, portavoz del grupo parlamentario socialista, llevan días tratando de cerrar la agenda que deben abordar Camps y Alarte cuando se reúnan. El PP prefiere centrar la conversación en temas como el agua o la financiación autonómica, mientras que los socialistas insisten en conversar sobre la crisis económica. José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy han mantenido varias entrevistas sobre la crisis.

Francisco Camps, preguntado sobre el futuro de la Sindicatura, instó ayer a los socialistas a recapacitar y a retomar el acuerdo porque las "instituciones de autogobierno no son moneda de cambio de nada, ni forman parte de una extraña negociación". El presidente se refirió al auto del TSJ que obliga a reponer en su cargo a Emilia Caballero, apartada por el PP, asegurando que se trata de un acto formal; pero que lo esencial es el pacto alcanzado hace meses entre ambos partidos por el que los socialistas se comprometieron a votar a José Cholbi como Síndic de Greuges. Camps responsabilizó al PSPV de haber roto el pacto.

Ángel Luna, portavoz socialista, reiteró que el pacto para nombrar Síndic a Cholbi no está roto, está "suspendido", supeditado a que el Consell consienta al diputado socialista José Camarasa el acceso a unos documentos que solicitó de dos empresas públicas. Vicente Rambla, vicepresidente y consejero de Presidencia, negó en noviembre de 2007 el acceso de Camarasa a las actas de los consejos de administración de la Sociedad para la Promoción de la Imagen Estratégica de la Comunidad Valenciana y la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana. Camarasa solicitó el amparo de la presidenta de las Cortes, Milagrosa Martínez. Y lo obtuvo. Pero el gesto protector de la presidenta de las Cortes no tuvo ningún efecto. Rambla rechazó mostrar los documentos en cuestión.

Era una gota más en una serie de gestos autoritarios del Consell hacia las Cortes. Pero el PP y el PSPV acababan de pactar el nombramiento de José Cholbi, vicepresidente de la Cortes, como Síndic de Greuges. Los socialistas decidieron jugar esa baza y suspendieron el acuerdo.

El varapalo del TSJ al intento de remoción de Emilia Caballero del puesto de Síndic fue recibido ayer con disparidad de opiniones por los portavoces de los dos grupos parlamentarios en las Cortes Valencianas.

Ricardo Costa, del PP, explicó que el auto en cuestión "no tumba" la modificación del Reglamento de la institución que pretendía hacer rotativo el cargo de Síndic en los periodos de mandato interino. Una fórmula para desplazar del cargo a Caballero, nombrada a propuesta del PSPV, durante un periodo de dos años y sustituirla por Carlos Morenilla, adjunto segundo y nombrado a propuesta del PP.

Costa subrayó que el auto solo ratifica una "suspensión cautelar" y anunció que el PP seguirá hostigando a Emilia Caballero para arrebatarle el puesto de Síndic antes de buscar fórmulas para desbloquear el acuerdo.

El portavoz del PP explicó: "Vamos a plantear otra modificación del Reglamento para evitar una situación que no está prevista por la ley, como es que en tres meses debe estar resuelto el nombramiento del Síndic". El PP intentaría aprovechar ese vacío legal para alterar el sentido de la ley a través de un Reglamento sin chocar con el principio de jerarquía normativa que es que el que invoca la sala segunda de lo Contencioso Administrativo del TSJ para ratificar la suspensión cautelar del primer cambio del Reglamento que impulsó y apoyo en solitario el grupo mayoritario.

Luna, por su parte, expresó una "satisfacción contenida" ante los tres autos sucesivos del TSJ contra el procedimiento impulsado por el PP para desplazar a Caballero como Síndic. "Hemos ganado una batalla que no nos gustaría haber tenido que plantear". Porque, según Luna, no se trata de un enfrentamiento entre el PP y el PSPV, sino entre "un Gobierno que quiere avasallar a la institución parlamentaria y una institución parlamentaria que no quiere o no puede defenderse".

"Estamos aquí para defender la dignidad de la Cámara ante la negativa del Consell a someterse al control de las Cortes", siguió Luna. "Estamos ante un hecho puntual pero simbólico" que pone en entredicho la actitud del presidente Camps, "fuera de su partido ya no se toleran ciertas actitudes y este caso no es sino un eslabón más de toda una cadena".

Luna reiteró: "Solo aprobaremos el nombramiento del nuevo Síndic si el Consell nos permite acceder a los documentos que reclamó Camarasa".

El portavoz socialista recurrió a los puros fundamentos de las relaciones institucionales para dictar: "Gobernar en democracia supone respetar el marco constitucional, estatutario, las normas del juego. Uno tras otro, los diputados del PP han rechazado las enmiendas socialistas al presupuesto alegando que tienen más votos. Olvidan que los electores dan legitimidad a un gobierno para que actúe dentro del respeto a las leyes. Las elecciones dan la mayoría, pero no dan la razón. Si falla el debate, si fallan las reglas del juego, solo queda el recurso a la autoridad".

Respecto a la intención del PP de abordar una segunda modificación del Reglamento del Síndic de Greuges, Luna se mostró irónico: "Si yo fuera el abogado que ha llevado todo esto, estaría sonrojado. En los autos del TSJ se aprecia un tono muy claro: 'No insista, por favor'. Lo único que lograrán es marear la perdiz para ganar tiempo".