Música de mil colores

Josh Rouse nació en Paxton (Nebraska), pero desde hace unos años vive con un pie en Valencia y el otro en Nueva York. Ha conseguido labrarse una excelente reputación entre los aficionados al pop artesanal e inmaculado, elegante y con cierto poso melancólico, un pop repleto de matices y resistente al paso del tiempo. No sorprende, pues, que Rouse no oculte su devoción por las hermosas producciones de los sesenta y setenta, o que, incluso, llegara a grabar un álbum, 1972, inspirado en la música de pop, soul y soft-rock que triunfaba en Estados Unidos cuando nació. Por el camino ha ...

Josh Rouse nació en Paxton (Nebraska), pero desde hace unos años vive con un pie en Valencia y el otro en Nueva York. Ha conseguido labrarse una excelente reputación entre los aficionados al pop artesanal e inmaculado, elegante y con cierto poso melancólico, un pop repleto de matices y resistente al paso del tiempo. No sorprende, pues, que Rouse no oculte su devoción por las hermosas producciones de los sesenta y setenta, o que, incluso, llegara a grabar un álbum, 1972, inspirado en la música de pop, soul y soft-rock que triunfaba en Estados Unidos cuando nació. Por el camino ha picoteado en el folk, el rock de raíces o el intimismo jazzy. Una paleta de colores que en sus manos brilla con especial intensidad. Su último disco oficial, Country mouse city house, salió en 2007. Y a la espera de su próximo trabajo, previsto para 2009, ha sacado un recopilatorio de sus primeros discos. En su página web (www.joshrouse.com) ha colgado diversas grabaciones en directo. Delicias para sus fans.