EA se reunirá con Aralar y Batasuna antes de decidir sobre la coalición

La dirección de Eusko Alkartasuna (EA) no quiere empezar la casa por el tejado. Tras admitir que se ha abierto una puerta que puede suponer un nuevo acuerdo de coalición con el PNV tras la designación por este partido de Juan José Ibarretxe como candidato a las autonómicas, fuentes de la dirección de EA confirmaron su intención de mantener en octubre reuniones con Aralar y con la izquierda abertzale antes de tomar la decisión final. "Hay una plena sintonía con el lehendakari, incluso en el discurso político sobre el derecho a decidir, pero queremos pulsar dentro y fuera del part...

La dirección de Eusko Alkartasuna (EA) no quiere empezar la casa por el tejado. Tras admitir que se ha abierto una puerta que puede suponer un nuevo acuerdo de coalición con el PNV tras la designación por este partido de Juan José Ibarretxe como candidato a las autonómicas, fuentes de la dirección de EA confirmaron su intención de mantener en octubre reuniones con Aralar y con la izquierda abertzale antes de tomar la decisión final. "Hay una plena sintonía con el lehendakari, incluso en el discurso político sobre el derecho a decidir, pero queremos pulsar dentro y fuera del partido antes de tomar ninguna decisión. Sin prisa; por eso no nos hemos puesto plazos", añadieron las citadas fuentes.

Ziarreta y Zabaleta mantuvieron una reunión antes del verano

Aralar asegura que su vocación es acudir en solitario a las autonómicas

El partido que preside Unai Ziarreta se muestra consciente de que quedan aún muchas incógnitas por despejar. Dentro y fuera. "La decisión que finalmente se tome por la Asamblea Nacional será consensuada. Yo no me opongo a la coalición", apuntó un destacado dirigente de EA, "pero no pretendo imponer la decisión final. Será consensuada y de abajo a arriba, pulsando el sentir desde ya de la militancia, ver cómo respira el cuerpo del partido", admitió a renglón seguido.

La dirección de EA también quiere testar la situación fuera de sus filas. Ello pasa por conocer de primera mano las intenciones de la izquierda abertzale que no condena la violencia y la posición de partida de Aralar ante los próximos comicios autonómicos. Los dos máximos responsables de Eusko Alkartasuna y Aralar, Unai Ziarreta y Patxi Zabaleta, respectivamente, mantuvieron una cita antes del verano y la voluntad de EA es repetir "este mes" una reunión del mismo estilo.

Fuentes de Aralar, partido que no ha visto con buenos ojos los comentarios "falsos" del coordinador de Ezker Batua, Javier Madrazo, sobre supuestas reuniones de ambas formaciones para posibles alianzas electorales, dejan claro que su posición de partida "es concurrir en solitario en marzo, tal y como ha recordado este fin de semana el propio Patxi Zabaleta".

Es evidente que el acuerdo entre EB y Aralar para las municipales y forales de 2007 no ha funcionado como ambos partidos preveían, fundamentalmente en Guipúzcoa. Y que cada vez que se ha puesto sobre la mesa un posible acuerdo electoral EA-Aralar, los claros puntos de desencuentro han "complicado el pacto", admiten fuentes de EA.

"Va a ser un mes de testar con el resto de partidos y tendremos encuentros tanto con Aralar como con Batasuna", anunciaron las citadas fuentes de la dirección de EA.

El presidente del PNV, Íñigo Urkullu, no ve dificultades para cerrar un nuevo acuerdo de coalición con EA. El líder peneuvista recordó que la decisión de no concurrir juntos en las pasadas elecciones municipales y forales fue de sus actuales socios en el Ejecutivo. "Siempre hemos estado abiertos a escuchar en base a la personalidad de cada uno y la razón de ser y representatividad", explicó en los micrófonos de Radio Euskadi.

Urkullu dijo que no existen dificultades para poder llegar a acuerdos de gobierno, "pero sí la necesidad de un juego de lealtad" ante los últimos desencuentros con su socio. Explicó que en materias como la reforma de los modelos lingüísticos su partido "está abierto a una reflexión con EA", si bien considera que "todas las cosas que se vayan a proyectar deben estar previamente habladas entre los socios del Gobierno vasco".