Reportaje:Días de diversión

Un diálogo entre la isla y Urgull

Un espectáculo de fuegos artificiales y música cerrará el sábado, ya fuera de concurso, la Semana Grande

La Semana Grande donostiarra se despedirá este año con un gran espectáculo de fuegos artificiales y música en la bahía, fuera ya del tradicional concurso pirotécnico. La empresa vizcaína Astondoa, fundada en 1885, quemará el sábado por la noche 800 kilos de pólvora. Mientras el sonido, la luz y los colores se adueñan de La Concha y sus alrededores, el público podrá escuchar trece canciones, desde Miserere, del compositor italiano Ennio Morricone, hasta Clocks, de la banda inglesa Cold Play.

"Es un espectáculo diferente, que no tiene nada que ver ni con el que abrió los Jue...

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La Semana Grande donostiarra se despedirá este año con un gran espectáculo de fuegos artificiales y música en la bahía, fuera ya del tradicional concurso pirotécnico. La empresa vizcaína Astondoa, fundada en 1885, quemará el sábado por la noche 800 kilos de pólvora. Mientras el sonido, la luz y los colores se adueñan de La Concha y sus alrededores, el público podrá escuchar trece canciones, desde Miserere, del compositor italiano Ennio Morricone, hasta Clocks, de la banda inglesa Cold Play.

"Es un espectáculo diferente, que no tiene nada que ver ni con el que abrió los Juegos Olímpicos de Pekín" la pasada semana "ni con los que tiran cada noche desde Alderdi Eder", comentó ayer la directora de la pirotecnia vizcaína, Izaskun Astondoa.

La firma Astondoa combinará 800 kilos de pólvora con trece canciones

La firma ha ideado la cita del sábado (22.45) como un espectáculo de comunicación y armonía entre el fuego y la música. Y, a su vez, como un diálogo entre los distintos puntos desde los que se lanzarán los fuegos artificiales: la isla de Santa Clara y el monte Urgull, a la altura de la Batería de las damas. A estos dos enclaves se sumará una gabarra colocada en mitad de la bahía, siempre y cuando lo permitan las condiciones del mar, según puntualizó Astondoa.

"Los fuegos quizá no estén perfectamente sincronizados con la música, pero, desde luego, no se entenderán sin ella", indicó la empresaria.

Precisamente para difundir lo mejor posible la música, está previsto colocar once torres de sonido a lo largo del paseo de La Concha, desde la terraza del Ayuntamiento hasta las cercanías del club Atlético de San Sebastián. Por ello, aunque lógicamente cada ciudadano es libre de disfrutar del espectáculo desde donde quiera, el concejal de Cultura, Ramón Etxezarreta, recomendó al público ubicarse entre el Hotel Londres y el Atlético, incluído el arenal de La Concha. Este es el tramo, según dijo, desde donde mejor se podrá contemplar y oir la propuesta pirotécnica, ya que a otras zonas no llegará tan bien la música.

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El caso es que para entonces ya se conocerá el ganador de la 45ª edición del Concurso Internacional de Fuegos Artificiales. "Este año se está viendo un buen nivel", adelantó ayer el periodista Juan Carlos López, miembro del jurado. La firma italiana Parente Fireworks, por ejemplo, que ofreció su espectáculo el pasado martes, "vino a romper, con una colección impresionante y con el claro objetivo de llevarse el primer premio". Lo mismo que la valenciana Zamorano Caballer, que lanzó el día anterior.

¿Significa esto que son las favoritas? López no va tan lejos. Según las referencias de que disponen, la empresa polaca Nakaja Art, que tira esta noche, también tiene "buenos espectáculos", igual que la valenciana Martí, que cerrará el concurso mañana. "Por tanto, nunca se puede decir", señala.

Lo mismo opina Astondoa, también miembro del jurado, compuesto por diez personas. "Hasta el momento lo que hemos visto está bien. Todos vienen con muchas ganas".

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