Voto responsable
Tras intensos debates en el grupo parlamentario socialista europeo y en el seno de la delegación española, voté convencido la tan denostada directiva de retorno.
Creo que fue un voto responsable a la mejor directiva posible, consciente de que iba, íbamos, a ser objeto de ataques despiadados, como así ha sido. Pero no se es parlamentario para quedar bien o para siempre recibir aplausos o para eludir críticas. Pensé que era lo mejor para la política migratoria de la UE y, sobre todo, para los inmigrantes, con la esperanza de que no haya en el futuro más muertos en los cayucos, más víctima...
Tras intensos debates en el grupo parlamentario socialista europeo y en el seno de la delegación española, voté convencido la tan denostada directiva de retorno.
Creo que fue un voto responsable a la mejor directiva posible, consciente de que iba, íbamos, a ser objeto de ataques despiadados, como así ha sido. Pero no se es parlamentario para quedar bien o para siempre recibir aplausos o para eludir críticas. Pensé que era lo mejor para la política migratoria de la UE y, sobre todo, para los inmigrantes, con la esperanza de que no haya en el futuro más muertos en los cayucos, más víctimas de las mafias, ni se consolide esa nueva forma de esclavitud que es para los patrones sin escrúpulos la inmigración sin papeles. Dicho esto, respeto y seguiré respetando a los que opinan de otra manera.