Modelos para una exposición

Una caja de madera y dentro un hombre posando. "Pon el pie un poco más arriba, apoyado en la pared", le dice Sofía Moro. Y él obedece a la fotógrafa, autora del libro Ellos y Nosotros, sobre los últimos protagonistas de la Guerra Civil española. Después, él se va feliz con su fotografía impresa. "Eso es lo mejor, acercar la fotografía a la gente y que lo pasen bien", explicó Moro.

Un centenar de personas acudió ayer a la Fundación Canal (calle de Mateo Inurria, 2) para ponerse delante del objetivo de seis fotógrafos: Ricardo Cases, Amy Chang, Luis de las Alas, Sofía Moro, Marta S...

Una caja de madera y dentro un hombre posando. "Pon el pie un poco más arriba, apoyado en la pared", le dice Sofía Moro. Y él obedece a la fotógrafa, autora del libro Ellos y Nosotros, sobre los últimos protagonistas de la Guerra Civil española. Después, él se va feliz con su fotografía impresa. "Eso es lo mejor, acercar la fotografía a la gente y que lo pasen bien", explicó Moro.

Un centenar de personas acudió ayer a la Fundación Canal (calle de Mateo Inurria, 2) para ponerse delante del objetivo de seis fotógrafos: Ricardo Cases, Amy Chang, Luis de las Alas, Sofía Moro, Marta Soul y Miguel Trillo. Con las fotos obtenidas (que se repetirán hoy de 10.00 a 14.00) se organizará en la fundación la muestra Mírate, encuadrada dentro de PHotoEspaña, del 13 de junio al 24 de agosto.

Patricia, de 34 años, esperaba sentada en el suelo del recibidor a pasar por las manos de uno de los artistas. Delante aún tenía a 15 personas, pero no le importaba la cola. "Lo he visto en la tele y he venido. Me encanta la fotografía, y me encantará verme después en la exposición", explicó la mujer, que aguardaba acompañada de su amigo Carlos, de 36 años. Ella quería un retrato; a él le apetecía una fotografía de cuerpo entero.

Los dos turnos de fotos, de mañana y tarde, se llenaron en media hora, con lo que mucha gente no logró su objetivo. Raquel y sus dos hijas, de 7 y 12 años, se quedaron sin tique. "A las niñas les hacía ilusión, pero bueno, otra vez será", dijo la madre, resignada.

Cada fotógrafo eligió la escenografía para su trabajo. La estadounidense Amy Chang, por ejemplo, escogió tres sillas distintas del Rastro y sacó a las personas sentadas en ellas. La madrileña Marta Soul caracterizó a los hombres con una camisa de cuadros, un delantal y una corbata, y a las mujeres les puso un pañuelo amarillo en la cabeza y unas gafas de sol. Ricardo Cases, valenciano, optó por hacer únicamente retratos, con un fondo bicolor, rojo y verde.