Carlos Kinder también deja el consejo de la promotora Aisa
El consejero delegado de la empresa catalana de ingeniería de sistemas y software GTD y consejero de Gas Natural, Carlos Kinder, ha abandonado también el consejo de administración de Aisa, según informó la empresa en un escueto comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Con la salida de Kinder, Aisa se ha quedado ya sin la mitad de sus consejeros. Entre el 31 de marzo y el 3 de abril, Juan Mestre (Tercat), Benjamín Chasco (Devesa Proyectos), Jordi Conejos (Agrupació Mútua) y Emiliano López protagonizaron la primera desbandada.
La marcha de los consejeros coi...
El consejero delegado de la empresa catalana de ingeniería de sistemas y software GTD y consejero de Gas Natural, Carlos Kinder, ha abandonado también el consejo de administración de Aisa, según informó la empresa en un escueto comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Con la salida de Kinder, Aisa se ha quedado ya sin la mitad de sus consejeros. Entre el 31 de marzo y el 3 de abril, Juan Mestre (Tercat), Benjamín Chasco (Devesa Proyectos), Jordi Conejos (Agrupació Mútua) y Emiliano López protagonizaron la primera desbandada.
La marcha de los consejeros coincide con uno de los momentos más complejos para la inmobiliaria. Aisa afronta la solicitud de concurso necesario de acreedores por parte de la aseguradora Asefa, que el juez debe resolver como máximo el mes que viene. Aisa tiene una deuda declarada a la CNMV de 444 millones de euros, inferior a los 490 millones de euros del año pasado gracias a varias desinversiones.
La cotización de la inmobiliaria, además, sigue suspendida sine díe por la CNMV porque el auditor de sus cuentas de 2007, BDO Audiberia, evitó pronunciarse ante la posibilidad de varios acreedores de reclamar su deuda, puesto que algunas condiciones habían vencido; la decisión del juez, y una compra que finalmente la compañía desestimó. Para salir a flote, Aisa ha tratado, sin éxito, de fusionarse con la antigua Astroc y el grupo Hemeretik.