Solbes muestra su oposición a un posible troceamiento de Iberdrola

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, afirmó ayer que no le agradaría una posible OPA sobre Iberdrola "para diseccionarla en diferentes empresas". Solbes compartió así la postura adelantada por el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, de oposición frontal a cualquier operación para desmembrar la compañía, una intención que se atribuye a la compañía estatal francesa EDF, en alianza con la constructora española ACS.

El vicepresidente, en declaraciones a RNE, expresó también su deseo de que no se produzca una "batalla" por Iberdrola, pero re...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, afirmó ayer que no le agradaría una posible OPA sobre Iberdrola "para diseccionarla en diferentes empresas". Solbes compartió así la postura adelantada por el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, de oposición frontal a cualquier operación para desmembrar la compañía, una intención que se atribuye a la compañía estatal francesa EDF, en alianza con la constructora española ACS.

El vicepresidente, en declaraciones a RNE, expresó también su deseo de que no se produzca una "batalla" por Iberdrola, pero recordó que España ha sido "bastante más liberal" en este tipo de operaciones que otros países como Francia. A propósito de este comentario, citó al primer ministro francés, François Fillon, quien dijo que su Ejecutivo no permitiría que Société Générale cayera en manos extranjeras.

Fuentes gubernamentales "tradujeron" las palabras de Solbes como una muestra de oposición "rotunda" del actual Ejecutivo español a la entrada de una empresa pública, como es la francesa, en "la cuarta eléctrica del mundo, de matriz española".

Tras la continua cascada de declaraciones en torno a posibles operaciones sobre la eléctrica española, el efecto más notorio ha sido la subida de su cotización en Bolsa. Ayer, las acciones de la eléctrica subieron, una vez más, como un cohete y cerraron con una ganancia del 6,49% (a 10,18 euros). Desde el 23 de enero, los títulos de la compañía han ganado un 30,5%. Es una alegría para los accionistas de la compañía y, en especial, para el primero de ellos, ACS. El grupo que preside Florentino Pérez, tras semanas de rumores en torno a su participación del 12,2% (7% de forma directa), se aleja de la línea roja bancaria a la que le habían empujado los créditos con los que adquirió las acciones y el desplome del valor. Si la cotización de sus iberdrolas no se hubiera recuperado, la aportación de nuevas garantías bancarias podría haber llegado a los 600 millones.

Con Iberdrola bajo la lupa de inversores y bancos de negocios, cada declaración de cierto nivel se traduce en euros. Ayer, el portavoz del Gobierno de Sarkozy, David Martinon, aseguró que el Ejecutivo ha leído la cartilla a la dirección de EDF. El mensaje, que "cualquier inversión en España debería hacerse con el acuerdo de las autoridades españolas".

Martinon reiteró, además, que el Gobierno español está informado del "interés de principio" de EDF sobre el mercado español.

Para que la tarta especulativa en torno a Iberdrola creciera como un bizcocho en el horno sólo faltaba un ingrediente: el presunto interés de otra gran compañía europea por entrar en la batalla. Y el ingrediente apareció. En Alemania, la prensa aseguró que E.ON -la derrotada en la batalla por Endesa-, también está interesada en Iberdrola. E.ON, no obstante, aclaró que sus planes se centran en la compra de activos de Endesa que pactó con Enel y Acciona.

Archivado En