Los empresarios de Benidorm logran un pacto para la promoción turística
Lejos de convertirse en un acontecimiento empresarial y social histórico, la presentación de la plataforma empresarial Benidorm Promotion esta semana ha pasado casi inadvertida después de más de dos años de negociación y desencuentros. Las asociaciones empresariales del comercio, hoteles, apartamentos turísticos, agencias de viaje, restaurantes, cafeterías, discotecas, pubs, salas de fiestas y parques temáticos han acordado participar en esta plataforma, abierta a las administraciones, para utilizar un fondo común de 78.000 euros (cada uno aporta 6.000 euros) en la difusión de la marca turísti...
Lejos de convertirse en un acontecimiento empresarial y social histórico, la presentación de la plataforma empresarial Benidorm Promotion esta semana ha pasado casi inadvertida después de más de dos años de negociación y desencuentros. Las asociaciones empresariales del comercio, hoteles, apartamentos turísticos, agencias de viaje, restaurantes, cafeterías, discotecas, pubs, salas de fiestas y parques temáticos han acordado participar en esta plataforma, abierta a las administraciones, para utilizar un fondo común de 78.000 euros (cada uno aporta 6.000 euros) en la difusión de la marca turística Benidorm. La presentación careció de entusiasmo, con la única presencia del dirigente de la Asociación de Apartamentos Turísticos (Aptur), Sergio Gambi, aupado a la presidencia de Benidorm Promotion. La principal asociación, la todopoderosa Hosbec, ha aceptado formar parte del colectivo como vocal, con cierta resignación y desconfianza.
Y es que durante estos dos años los empresarios que querían promocionar conjuntamente la marca Benidorm se han dicho de todo. La del "turista del bocadillo" fue la última acusación. Para muchas asociaciones, principalmente comerciantes, restauradores y locales de ocio, Hosbec potencia un turista sin dinero. Mientras, los hoteles creen que es el comercio el que no está a la altura, con el "todo a 100" y las tiendas chinas. Y restaurantes y discotecas acusan a los parques temáticos de "robarles" clientes al montar banquetes de bodas y comuniones.