Moderado pesimismo para cerrar
El mercado de valores español ha despedido el año con cierto sabor agridulce pues, si bien el Ibex 35 termina con una ganancia acumulada del 7,32%, en este último mes de diciembre se ha dejado el 3,66%.
En esta última sesión, el principal índice de la Bolsa española mantuvo el tono del día anterior y perdió el 0,48%, con lo que la semana más corta del ejercicio, con sólo dos sesiones, se cierra también en negativo.
El ambiente en el mercado era de desconcierto, debido a la resistencia relativa de los grandes valores a ceder terreno y a los numerosos varapalos que sufría el resto ...
El mercado de valores español ha despedido el año con cierto sabor agridulce pues, si bien el Ibex 35 termina con una ganancia acumulada del 7,32%, en este último mes de diciembre se ha dejado el 3,66%.
En esta última sesión, el principal índice de la Bolsa española mantuvo el tono del día anterior y perdió el 0,48%, con lo que la semana más corta del ejercicio, con sólo dos sesiones, se cierra también en negativo.
El ambiente en el mercado era de desconcierto, debido a la resistencia relativa de los grandes valores a ceder terreno y a los numerosos varapalos que sufría el resto de los valores. El Ibex Medium cayó el 1,42% y el Small Cap el 0,98%, lo que hace que en el conjunto del ejercicio estos índices ofrezcan un saldo negativo, del 10,35% para los valores medianos y del 5,44% para los pequeños.
En conjunto, la inestabilidad que ha generado la situación en Pakistán era la que marcaba la pauta a los mercados, con comportamientos negativos en renta variable y nuevas alzas en oro y petróleo.
Con esta situación, las perspectivas para el próximo año no sólo no mejoran, sino que incluso se ponen un poco peor si la presión sobre el precio del petróleo se mantiene.
En Estados Unidos se publicó el índice de gestores de compras de Chicago, que ofreció una inesperada subida en diciembre y se aleja de la zona que indica paralización de la actividad. Junto con esta buena noticia llegó un dato algo más viejo, el de venta de viviendas nuevas en noviembre que, con una caída del 9%, refuerza la opinión negativa sobre el futuro del mercado inmobiliario, al menos en aquel país.
Los valores inmobiliarios volvieron a "dar la nota" en esta sesión en el mercado español, dejando ver con ello que los inversores no comprenden, o no están de acuerdo, con los movimientos puestos en marcha para tratar de solventar los efectos de una posible crisis de la mejor manera posible.
La contratación fue, lógicamente, bastante baja.