Paseo con Rodin
El pintor Eugenio Chicano (Málaga, 1935), primer director de la Fundación Pablo Ruiz Picasso, recorre la exposición de Auguste Rodin. Éstas son sus reflexiones."!Fíjate cómo le mira la gente. Y pensar que le negaron el ingreso en la Academia de Bellas Artes de París... La gran fiesta del arte es coger siete kilos de barro, cuatro palos y montar esta maravilla. Si está pensando en el infierno o en el más allá es pura farfolla. Lo que importa aquí es la fuerza de la figura. Tiene tanto oficio y domina tan bien la técnica que con él no es necesario que venga un filósofo a hablar de que su obra es...
El pintor Eugenio Chicano (Málaga, 1935), primer director de la Fundación Pablo Ruiz Picasso, recorre la exposición de Auguste Rodin. Éstas son sus reflexiones."!Fíjate cómo le mira la gente. Y pensar que le negaron el ingreso en la Academia de Bellas Artes de París... La gran fiesta del arte es coger siete kilos de barro, cuatro palos y montar esta maravilla. Si está pensando en el infierno o en el más allá es pura farfolla. Lo que importa aquí es la fuerza de la figura. Tiene tanto oficio y domina tan bien la técnica que con él no es necesario que venga un filósofo a hablar de que su obra es una provocación inquietante ni nada parecido. No es que la crítica sea un camelo, pero actualmente hay cierta inercia a considerar que en el arte contemporáneo vale todo. Al particularizar cada figura de los Burgueses de Calais [las piezas se muestran por separado]se gana en detalle, pero se pierde en ritmo, drama y grandilocuencia. Es como si a una ópera le quitas los recitados, las entradas y las salidas y te quedas solo con unas pocas arias. Vi al Pensador por primera vez en una explanada frente al Museo de Arte de Cleveland, en Estados Unidos. Allí la lluvia y la intemperie habían acentuado la anatomía de la pieza, aquí tienen una pátina demasiado nueva. Las esculturas reflejan el empeño de Rodin de crear una nueva figuración, revolucionaria para su época. Rodin se aleja de la representación plástica de la belleza propia de Italia, que tiene algo de proyección divina y extrasensorial. Él lo ve al revés: da sentimiento y expresión a la piedra, con figuras de anatomía muy definida en las que se exagera un poco lo natural y se deja fuera lo superfluo. Me gustaría que esta exposición -si las cosas no pasan en calle Larios parece que no pasan- sirva para abrir un debate en la ciudad. Me voy a morir sin ver a Málaga hecha una señora. Está encorsetada y perdida en pregones a pesar de tenerlo todo a su favor. ¿Saldrán artistas de la Escuela de Bellas Artes que dominen las técnicas y el oficio o sus clases se limitarán a provocaciones, art trouvé y a ordenadores y artes visuales".
Calle Larios. Málaga. Hasta el 12 de diciembre.