El hombre que tiró al metro a una mujer pasará 11 años internado

Miriam, la víctima: "A mí él me ha condenado para siempre"

Jorge Ramos, el hombre que arrojó a una mujer de 21 años a las vías del metro en octubre de 2005, pasará los próximos 11 años en el centro psiquiátrico penitenciario de Fontcalent (Alicante). La Sección 23 de la Audiencia de Madrid absuelve a Ramos, de 26 años, del homicidio que le atribuía el fiscal, y ordena su encierro en un psiquiátrico. La víctima, Miriam Alonso, se mostró ayer decepcionada: "En España no hay justicia", dijo tras conocer la sentencia en la Audiencia.

El tribunal ha atendido los informes de los psiquiatras y considera que Ramos no era consciente de sus actos ...

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Jorge Ramos, el hombre que arrojó a una mujer de 21 años a las vías del metro en octubre de 2005, pasará los próximos 11 años en el centro psiquiátrico penitenciario de Fontcalent (Alicante). La Sección 23 de la Audiencia de Madrid absuelve a Ramos, de 26 años, del homicidio que le atribuía el fiscal, y ordena su encierro en un psiquiátrico. La víctima, Miriam Alonso, se mostró ayer decepcionada: "En España no hay justicia", dijo tras conocer la sentencia en la Audiencia.

El tribunal ha atendido los informes de los psiquiatras y considera que Ramos no era consciente de sus actos debido a la esquizofrenia paranoide que le fue diagnosticada con 17 años. La sentencia señala que no podrá abandonar el establecimiento psiquiátrico, un hospital cerrado y con vigilancia, sin autorización del tribunal y durante un periodo no inferior a 11 años. El hombre será trasladado a Fontcalent, donde ya ha estado internado desde que cometió el crimen.

Los magistrados creen que solamente con el internamiento en un centro de estas características "es posible una supervisión seria del imprescindible tratamiento" que tiene que seguir, y que debe ser un centro psiquiátrico penitenciario por la "peligrosidad demostrada del enfermo, la posibilidad de repetición de actos similares y la necesidad de un tratamiento prolongado y vigilado".

El tribunal subraya que Ramos llevaba un año sin tomar la medicación que le habían prescrito los médicos para tratar su esquizofrenia -"desde 2004 no siguió tratamiento alguno"-, por lo que en octubre de 2005 "no tenía noción de ser un enfermo y de precisar ayuda".

Cuando arrojó a Miriam a las vías, justo cuando llegaba un convoy a la estación de Carabanchel, su esquizofrenia le había llevado a la convicción de que debía hacerlo para manifestar la presencia de Dios en el mundo, según explicó a los psiquiatras.

El tribunal, que preside la juez María Riera, señala que la enfermedad que padece Ramos le hace inimputable, aunque "tenía capacidad mental para decidir ejecutar su plan y para discernir el modo de ejecución". Es decir, supo que lo que había hecho estaba mal, pero su estado mental le impedía frenar su acción. Tras arrojar al metro a Miriam, Ramos salió corriendo de la estación. Ya en la calle se dirigió hacia un vigilante del hospital Gómez Ulla y, juntando las palmas de sus manos, le dijo: "Acabo de tirar a una chica al metro; mátame, espósame".

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El condenado tendrá que indemnizar con 500.000 euros a Miriam Alonso, y con otros 150.000 a los padres, que son quienes la cuidan ahora. Miriam, a la que el tren le segó una de sus piernas, expresó ayer su contrariedad con la sentencia: "En España no hay justicia. Esperaba un fallo más duro. A mí él me ha condenado para siempre".

"Me parece un poquito fuerte que sólo le hayan impuesto 11 años con la enfermedad que tiene y lo peligroso que es, porque me intentó matar. No lo olvidemos", continuó Miriam, que afirmó que la Justicia "trata peor a los que no han hecho nada que a los culpables".

La defensa de la víctima pedía una pena de internamiento para Ramos de 20 años y una indemnización de casi 900.000 euros. "No sabemos quién la va a pagar ni si la van a pagar", explicó Miriam, que vive en un piso que le ha cedido el Ivima adaptado a su deficiencia.

La abogada de Miriam, Olga López, tampoco estaba satisfecha con el fallo. "Son pocos años", explicaba, al tiempo que señalaba que va a estudiar si la recurre o no.

Miriam Alonso y su abogada Olga López, tras conocer el fallo.MANUEL ESCALERA

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