Un terrorista suicida mata en Afganistán a 30 pasajeros de un autobús militar
Los talibanes golpearon ayer Kabul, la capital de Afganistán, con un sangriento atentado contra un autobús militar que, según el presidente del país, Hamid Karzai, causó la muerte a 28 soldados y dos civiles, mientras que otras 29 personas resultaron heridas.
El atentado tuvo lugar a las 6.45 (dos horas menos en la España peninsular), cuando un terrorista suicida enfundado en un uniforme del Ejército montó en un autobús militar e hizo estallar una carga explosiva.
"Fue una tragedia terrible, un acto de extrema cobardía", declaró Karzai. "Quienquiera que lo hizo actuó contra la ge...
Los talibanes golpearon ayer Kabul, la capital de Afganistán, con un sangriento atentado contra un autobús militar que, según el presidente del país, Hamid Karzai, causó la muerte a 28 soldados y dos civiles, mientras que otras 29 personas resultaron heridas.
El atentado tuvo lugar a las 6.45 (dos horas menos en la España peninsular), cuando un terrorista suicida enfundado en un uniforme del Ejército montó en un autobús militar e hizo estallar una carga explosiva.
"Fue una tragedia terrible, un acto de extrema cobardía", declaró Karzai. "Quienquiera que lo hizo actuó contra la gente, contra la humanidad, definitivamente contra el islam. Un hombre que se llama a sí mismo musulmán no mataría a gente inocente en pleno Ramadán", añadió.
El presidente afgano ofreció ayer al líder de los talibanes, el mulá Omar, iniciar conversaciones que podrían posibilitar la cesión de una cartera ministerial a los islamistas a cambio del fin de la creciente violencia insurgente. "Si sé dónde vive no hay necesidad de que venga a verme, yo iré personalmente allí y me pondré en contacto con él", añadió Karzai.
Por otra parte, los cuatro trabajadores de la Cruz Roja secuestrados por los talibanes esta semana en el centro de Afganistán fueron puestos ayer en libertad.
El secuestro se produjo el pasado miércoles en la provincia centro-oriental de Maidan Wardak, aunque ayer el propio portavoz talibán, Zabiullah Mujahid, aseguró que se trató de un error y que la milicia se disponía a liberarlos.