Y a ti, ¿cuál te gusta?
Los ciudadanos pueden elegir el logo olímpico. La 'web' del Ayuntamiento no controla que cada persona vote sólo una vez
Un pasquín color azul cielo más pequeño que una postal. En el dorso lleva estampados los 10 logos que compiten para representar Madrid como candidata a albergar los Juegos Olímpicos de 2016. Es la tarjeta electoral de la que los madrileños disponen desde ayer para elegir los tres que quedarán finalistas en el concurso popular. Se presentaron 2.691. Un jurado de expertos escogió a los 10 mejores. La palabra la tienen ahora los ciudadanos, antes de volver al dictamen de profesionales que elegirán el ganador. Luego Madrid empezará su larga campaña, pues sólo en octubre de 2009 sabremos dónde se c...
Un pasquín color azul cielo más pequeño que una postal. En el dorso lleva estampados los 10 logos que compiten para representar Madrid como candidata a albergar los Juegos Olímpicos de 2016. Es la tarjeta electoral de la que los madrileños disponen desde ayer para elegir los tres que quedarán finalistas en el concurso popular. Se presentaron 2.691. Un jurado de expertos escogió a los 10 mejores. La palabra la tienen ahora los ciudadanos, antes de volver al dictamen de profesionales que elegirán el ganador. Luego Madrid empezará su larga campaña, pues sólo en octubre de 2009 sabremos dónde se celebrarán los Juegos Olímpicos.
Cinco cilindros de cemento coloreado hacen de expositores en el paseo del Prado. El alcalde Alberto Ruiz-Gallardón animó ayer a votar a todos los "que apoyen la aspiración de Madrid". Acto seguido depositó su papelito en la urna transparente.
Hasta el 23 de septiembre se puede votar de dos maneras: en la página web del Ayuntamiento (www.munimadrid.es/madrid16) o en diferentes puntos de la ciudad (Cibeles, avenida de Entrevías, General Perón y estadio Madrid Arena). En el papelito azul hay que poner el nombre y el número del DNI. El Comité Olímpico controlará la validez de los votos.
Pero si se vota por Internet, el sistema sólo pide teclear un correo electrónico. Es imposible controlar que la misma persona no vote dos veces a través de distintas direcciones. "¡A llamar a los amigos!", animaba ayer uno de los participantes. No queda otra para garantizarse un buen apoyo popular.
Los 10 semifinalistas son profesionales de la comunicación por imágenes. Arquitectos y diseñadores gráficos empatan. Tienen entre 22 y 37 años. Líneas y colores juegan en sus obras para crear logos fáciles de memorizar, de reproducir y que mencionan la expresión Madrid 2016. La mayoría participan como freelance, dos son los estudios. Como los jóvenes de Fósforo Artworks. Son amigos más que colegas. A 16 manos y ocho cerebros han creado una imagen de sabor casi infantil: "Una pincelada negra sobre fondo blanco creando una figura que recuerda a los grandes maestros de la pintura española", explica José Luis Aguilera, de 28 años. No es su primera participación en concursos, ya dieron imagen a la denominación de origen de Málaga, a la Orquesta Nacional, por ejemplo.
Quien sí es una novata de los certámenes es Graciela Cancio. Tiene 22 años y estudia diseño gráfico. Ha venido a la presentación arropada por un despliegue de familiares de ojos brillantes y ropa elegante. Ella está plantada frente a su obra: un haz de rayas de colores. "Representa las culturas del mundo y de Madrid, unidas por el espíritu olímpico". Si fuera elegida Graciela, ganaría 30.000 euros. Si quedara entre los tres finalistas, 5.000. "Me montaría un estudio", sueña.
Luis Coderque, de 32 años, tiene toda la pinta del diseñador gráfico. Pelo despeinado, camiseta desteñida, defiende su obra: un trazo de luz sobre fondo negro que dibuja una M. Como Madrid, "la ciudad en la que nací y a la que siempre vuelvo", dice.