FERIA DE MÁLAGA

Frustrado mano a mano

El domingo por la noche se celebró con lleno de "no hay billetes" el esperado mano a mano entre El Cid y Alejandro Talavante, que fue un lamentable fracaso a causa de los mal presentados, mansos, descastados e inválidos tres toros de Gerardo Ortega, dos de Román Sorando y un sobrero de Gavira, y unos diestros espesos y pesados hasta el más sofocante aburrimiento.

Seis toros, seis silencios, muchos trapazos y pinchazos, escasas protestas del público y muy pocos momentos de toreo que no tuvieron continuidad a causa de la falta de entrega de los toros. Los toreros, por su parte, también fu...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El domingo por la noche se celebró con lleno de "no hay billetes" el esperado mano a mano entre El Cid y Alejandro Talavante, que fue un lamentable fracaso a causa de los mal presentados, mansos, descastados e inválidos tres toros de Gerardo Ortega, dos de Román Sorando y un sobrero de Gavira, y unos diestros espesos y pesados hasta el más sofocante aburrimiento.

Seis toros, seis silencios, muchos trapazos y pinchazos, escasas protestas del público y muy pocos momentos de toreo que no tuvieron continuidad a causa de la falta de entrega de los toros. Los toreros, por su parte, también fueron responsables del fracaso en tanto en cuanto imponen el ganado con el que se anuncian. El Cid y Talavante naufragaron en todo momento, y pretendieron inútilmente justificarse con faenas largas, insulsas y soporíferas. Sólo unas garbosas verónicas del primero y unos derechazos ligados de Talavante en el cuarto recordaron fugazmente que se celebraba una corrida de toros y no el denigrante espectáculo en el que todos los protagonistas la convirtieron.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En