Una hija regresa a casa
Mari Cruz de los Ríos dirige el cortometraje 'Julia' en Chiclana
El crepúsculo marca el ritmo a contrarreloj de los cineastas. Los pocos minutos en los que el sol se esconderá tras el mar de una playa de Chiclana son los elegidos para rodar el plano final de Julia, el corto de 35 milímetros con el que se estrenan en el gran formato los alumnos de la quinta promoción de la Escuela de Cine de Puerto Real (Cádiz). Dirigida por Mari Cruz de los Ríos y escrita por Nacho Mendoza, la película narra la difícil relación entre una hija que regresa a casa y una madre que permanece sumergida en un mundo de olvido. Un baile al atardecer las reconciliará.
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El crepúsculo marca el ritmo a contrarreloj de los cineastas. Los pocos minutos en los que el sol se esconderá tras el mar de una playa de Chiclana son los elegidos para rodar el plano final de Julia, el corto de 35 milímetros con el que se estrenan en el gran formato los alumnos de la quinta promoción de la Escuela de Cine de Puerto Real (Cádiz). Dirigida por Mari Cruz de los Ríos y escrita por Nacho Mendoza, la película narra la difícil relación entre una hija que regresa a casa y una madre que permanece sumergida en un mundo de olvido. Un baile al atardecer las reconciliará.
El guión de Mendoza fue el elegido entre cuatro finalistas. Conseguía ganar el premio organizado por la RTVA que conlleva la filmación de esta historia en 35 milímetros. "Es una experiencia inesperada", explica el guionista y también ayudante de dirección. "Pensé que iba a ser más estresante pero la preproducción hace que, una vez en el rodaje, todo vaya saliendo sin tiempo casi para preocuparse", detalla el joven cineasta, que debuta profesionalmente.
Su idea gira en torno a dos mujeres: Julia-madre y Julia-hija. Esta última regresa a casa tras haber cumplido las metas que la sociedad establece como marcas de éxito, fundamentalmente, una carrera y un futuro laboral aparentemente próspero, tal y como le inculcó su progenitora. Pero, al volver, su madre está muy enferma. Padece Alzheimer y hace semanas que no se comunica con nadie. Sólo tiene la vista fijada a un punto infinito con la mirada perdida. Unas marionetas ayudarán a la comunicación entre ambas.
"Es una historia sobre las proyecciones que nos hacemos como seres humanos, sobre la incomunicación, sobre las expectativas que nos marcan nuestros padres, sobre el amor familiar", describe el guionista.
Mari Cruz de los Ríos, también alumna de la Escuela, es la encargada de dirigir el cortometraje, tras haber sido elegido su proyecto como el más viable para hacer realidad el guión de Mendoza. "Yo vi la historia menos siniestra. Me gusta mucho el teatro y vi en esas marionetas, con las que ambas protagonistas se relacionaban hacía años, la oportunidad de que la hija pueda entrar en el mundo en el que está la madre", explica.
El corto se montará en digital, se emitirá en Canal 2 Andalucía y buscará su difusión entre festivales. "Es un trabajo ambicioso. Puede rondar los 15.000 euros", detalla el director de la Escuela, José Manuel Tenorio. Se trata de proyectos donde cada alumno tiene su función, incluso los autores de los otros guiones que quedaron finalistas.