Enrique Nóvoa no pudo inaugurar unas pozas termales
La Junta Electoral prohibió al alcalde de Ourense y candidato a la alcaldía por el PP, Enrique Nóvoa, la inauguración de unas pozas termales en Outariz, dentro del término municipal orensano
prevista para la mañana de ayer. El PSdeG denunció el viernes el carácter "claramente electoralista" de la previsión del regidor-candidato.
Frustrada la inauguración anunciada, Nóvoa mantuvo, en su calidad de alcalde en funciones, otras actividades institucionales convocadas para el mismo día de reflexión. Así, congregó a media tarde a un buen número de jubilados en el Jardín del Posío convoc...
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La Junta Electoral prohibió al alcalde de Ourense y candidato a la alcaldía por el PP, Enrique Nóvoa, la inauguración de unas pozas termales en Outariz, dentro del término municipal orensano
prevista para la mañana de ayer. El PSdeG denunció el viernes el carácter "claramente electoralista" de la previsión del regidor-candidato.
Frustrada la inauguración anunciada, Nóvoa mantuvo, en su calidad de alcalde en funciones, otras actividades institucionales convocadas para el mismo día de reflexión. Así, congregó a media tarde a un buen número de jubilados en el Jardín del Posío convocados desde el ayuntamiento bajo el eslogan de Tardes de Baile de nuestros mayores, una actividad organizada por la institución local para las tardes de los sábados de primavera.
Pleno en Lobios
Los vecinos de Lobios vivieron el viernes una agitada jornada de fin de campaña. El alcalde, Benito Vázquez (PP), decidió convocar un pleno extraordinario para las nueve de la noche sin otro punto en el orden del día que establecer el sueldo de una funcionara militante de su mismo partido.
La convocatoria generó el malestar de la oposición y de buena parte del pueblo. Cerca de un centenar de vecinos (del PP, del PSdeG y del BNG) abarrotaron las dependencias municipales. Los integrantes de la candidatura socialista vieron en la decisión del alcalde "una provocación" y un "acto de demostración de fuerza", toda vez que los cuatro concejales con que contaba el PSOE en ese ayuntamiento renunciaron a su representación -fueron expedientados por el partido- y no podían, por tanto, asistir a la sesión plenaria. Sí lo hicieron el único representante del BNG y los seis ediles del PP.
La numerosa representación vecinal llevó al alcalde a solicitar la presencia de fuerzas de seguridad ante el temor de que pudiera producirse algún altercado. Aunque finalmente no fue necesaria la presencia de la Guardia Civil. No se registraron incidentes. El pleno, no obstante, se celebró con gran tensión, apenas tres horas antes del inicio de la jornada de reflexión.
Una vez iniciada la sesión y resuelto sin debate el primer y único punto, el alcalde introdujo un nuevo asunto en el orden del día, relativo a la aprobación de una partida presupuestaria que también se aprobó con un simple alzamiento de manos. "Fue un mitin de cierre de campaña sirviéndose de la institución local", denuncian los representantes del PSdeG en el municipio, que creen que el regidor local sólo pretendía provocarlos "para que protagonizáramos algún escándalo".