España gana y pierde
Con las nuevas tarifa de protección al consumidor aprobadas ayer por Bruselas España gana y pierde. Gana porque los más de 44 millones de abonados podrán encender el móvil cuando estén en el extranjero sin temor. Y pierde, porque las operadoras españolas son junto con las francesas las que más ingresan por este concepto, gracias los 60 millones de turistas que vienen a España cada año. No es de extrañar que las operadoras hayan manifestado su oposición frontal a la medida.
De hecho, el Gobierno español fue de los que más se opuso al plan de reducción por estimar que perjudicaría a las t...
Con las nuevas tarifa de protección al consumidor aprobadas ayer por Bruselas España gana y pierde. Gana porque los más de 44 millones de abonados podrán encender el móvil cuando estén en el extranjero sin temor. Y pierde, porque las operadoras españolas son junto con las francesas las que más ingresan por este concepto, gracias los 60 millones de turistas que vienen a España cada año. No es de extrañar que las operadoras hayan manifestado su oposición frontal a la medida.
De hecho, el Gobierno español fue de los que más se opuso al plan de reducción por estimar que perjudicaría a las telefónicas que operan en España, y con ello a la fiscalidad. Madrid había hablado de 31 céntimos para las telefónicas y aceptó los 30. Las asociaciones de consumidores advirtieron ayer que la rebaja aprobada por Bruselas era insuficiente.
De todas formas, para los abonados más viajeros la rebaja no será tan sustancial puesto que los tres grandes operadores Movistar, Vodafone y Orange cuentan con planes especiales de roaming.