"Lo más importante es la colaboración"
Clara Boj (1975) y Diego Díaz (1975) investigan las trasformaciones del espacio público por medio de las nuevas tecnologías en obras, que también inciden en el debate sobre la propiedad del espacio digital.
Su obra Red Libre Red Visible, que forma parte del Carnivore Project, un proyecto basado en el uso creativo de datos captados a través del programa homónimo, creado por el FBI para realizar interceptaciones en Internet, ofrece al público la posibilidad de visualizar e interactuar con el flujo de datos, que normalmente permanece oculto. La obra se presenta en Gijón en una insta...
Clara Boj (1975) y Diego Díaz (1975) investigan las trasformaciones del espacio público por medio de las nuevas tecnologías en obras, que también inciden en el debate sobre la propiedad del espacio digital.
Su obra Red Libre Red Visible, que forma parte del Carnivore Project, un proyecto basado en el uso creativo de datos captados a través del programa homónimo, creado por el FBI para realizar interceptaciones en Internet, ofrece al público la posibilidad de visualizar e interactuar con el flujo de datos, que normalmente permanece oculto. La obra se presenta en Gijón en una instalación interactiva, que recrea el espacio físico de Laboral en una pequeña maqueta, y permite a los visitantes visualizar los graffitis virtuales que pueden realizar sobre las paredes del centro.
1. Lo más importante es la colaboración, la idea de comunidad, la sinergia entre disciplinas humanísticas y científicas, y el movimiento del código libre.
2. En el aspecto técnico aumentará el uso de la electrónica y saldremos del ordenador para usar pequeños dispositivos inalámbricos, creados por artistas. Conceptualmente se dejará de hablar del código y del medio y se plantearán temáticas comunes a otras expresiones del arte contemporáneo, centradas en las transformaciones sociales y económicas.
3. Hay un regreso a las interfaces físicas y a los sistemas objetuales interactivos, pero en Internet hay otra creatividad y muchas propuestas creativas, cuyos autores no se consideran artistas. La Web 2.0 es como una inmensa obra de net.art y su poética son los flujos de la información, los blogs y todo lo demás.
4. La tecnología puede quedarse obsoleta, pero las buenas obras de arte mantienen su vigencia, porque reflejan su momento. Los artistas reflexionan sobre su realidad con las herramientas de su época, así que habrá cada vez más arte digital.
5. A veces la interacción hace que el público se centre más en la mecánica de la pieza que en el concepto. El acercamiento debe ser más profundo y superar el interés por el funcionamiento.
6. Entre mercado del arte e industria, lo mejor es la universidad. El mercado te exige obras vendibles y coleccionables, y la industria te presiona para que utilices determinadas tecnologías. Las universidades podrían proporcionar los medios necesarios, salvaguardando la independencia y tranquilidad del creador. Desgraciadamente en las españolas faltan equipamientos para la producción artística y la gestión burocrática absorbe buena parte de los medios y las fuerzas.