El Ayuntamiento combatió el 'botellón' en Malasaña pese a que la ley lo permite en fiestas

La normativa de la Comunidad autoriza en días de feria el consumo de alcohol en la calle

La Policía Municipal de Madrid blindó el miércoles la plaza del Dos de Mayo, en el barrio de Malasaña (distrito de Centro), e impidió que los jóvenes pudieran consumir alcohol en esta zona, pese a que era una festividad de carácter regional. El artículo 30 de la Ley de Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos, aprobada durante el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, recoge en su artículo 30 apartado 3, que se permite beber alcohol en la calle "en días de feria o fiestas patronales". El día 2 de mayo es festivo y se conmemora el Día de la Comunidad de Madrid.

Unos 30 policías munici...

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La Policía Municipal de Madrid blindó el miércoles la plaza del Dos de Mayo, en el barrio de Malasaña (distrito de Centro), e impidió que los jóvenes pudieran consumir alcohol en esta zona, pese a que era una festividad de carácter regional. El artículo 30 de la Ley de Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos, aprobada durante el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, recoge en su artículo 30 apartado 3, que se permite beber alcohol en la calle "en días de feria o fiestas patronales". El día 2 de mayo es festivo y se conmemora el Día de la Comunidad de Madrid.

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Unos 30 policías municipales se apostaron desde primera hora de la tarde del martes 1 de mayo (también festivo) y colocaron vallas para controlar el acceso a la plaza del Dos de Mayo. Registraban a todos los jóvenes que iban cargados con mochilas y bolsas para impedir que pudieran acceder con botellas y tetrabriks de alcohol. Estas medidas se prolongaron durante la madrugada del día 2 y hasta que estallaron los violentos incidentes.

Fuentes municipales explicaron que la prohibición de consumo en la plaza se debió a que no se trataba de un recinto ferial acotado y que no había fiestas patronales en ningún punto de la capital y menos en Malasaña, donde fue denegado el permiso del Ayuntamiento. "Es como cuando se celebra San Isidro. Sólo se permite el consumo de alcohol en la pradera y no en todo Carabanchel", ejemplificaron esas fuentes.

La ley regional es clara en este punto. Aprobada en junio de 2002, durante el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, recoge en el capítulo 30.3 las prohibiciones y las siguientes excepciones: "No se permitirá la venta ni el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, salvo terrazas, veladores, o en días de feria o fiestas patronales o similares regulados por la correspondiente ordenanza municipal".

Dicha ordenanza municipal no ha sido redactada desde la aprobación de la ley, por lo que, a falta de regulación posterior, puede entenderse que en estas fechas está autorizado el hacer botellón en la calle.

Una situación similar se vivió la misma noche del 2 de mayo, cuando agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), conocidos como antidisturbios, se colocaron en las seis entradas que tiene la plaza del barrio de Malasaña. Prohibían la entrada a todos los jóvenes e identificaron a algunos, al pedirles el carné de identidad. Otros agentes patrullaron a pie por las calles aledañas. Algunos policías municipales estaban dentro de la plaza, junto al monumento conmemorativo a Daoiz y Velarde.

A esta prohibición, que podría ser contraria a la ley regional, se unió la falta de preparación de los policías municipales en materia de disturbios. Esto quedó patente cuando empezaron los disturbios en la madrugada del 2 de mayo. Los agentes carecían de cascos (salvo los que llevaban motos) y de escudos protectores.

La Policía Municipal y el Cuerpo Nacional de Policía mantendrán este fin de semana -en especial el viernes y el sábado- un dispositivo conjunto en el barrio de Malasaña para evitar que se reproduzcan los altercados del martes y el miércoles en el que se registraron 68 heridos y 15 detenidos, según destacaron portavoces de ambos cuerpos. Éstos no quisieron dar más detalles para no dar pistas a los posibles alborotadores.

Un joven hace gestos obscenos a tres antidisturbios, de espaldas, en las proximidades de la plaza del Dos de Mayo la noche del miércoles.EFE

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