La junta electoral validó en 2003 que los partidos acudan a las municipales bajo diferentes siglas
La ley sólo obliga a los partidos a hacer constar su nombre oficial en el registro, no en las papeletas
La publicitada denuncia de Convergència i Unió contra las listas electorales de la izquierda en las que no aparecen los nombres de PSC, ERC o Iniciativa, tiene pocas posibilidades de prosperar si la Junta Electoral Central mantiene los mismos criterios de 2003. Este organismo validó en las últimas elecciones municipales, a raíz de una denuncia similar de CiU, que las formaciones políticas puedan utilizar segundas marcas, como Progrés Municipal en el caso del PSC o Acord Municipal en el caso de ERC siempre que se haga "constar en el pacto de constitución de la coalición".
Los ciudadanos ...
La publicitada denuncia de Convergència i Unió contra las listas electorales de la izquierda en las que no aparecen los nombres de PSC, ERC o Iniciativa, tiene pocas posibilidades de prosperar si la Junta Electoral Central mantiene los mismos criterios de 2003. Este organismo validó en las últimas elecciones municipales, a raíz de una denuncia similar de CiU, que las formaciones políticas puedan utilizar segundas marcas, como Progrés Municipal en el caso del PSC o Acord Municipal en el caso de ERC siempre que se haga "constar en el pacto de constitución de la coalición".
Los ciudadanos de unos 300 municipios catalanes no encontrarán en sus colegios electorales ninguna papeleta con el nombre del Partit dels Socialistes, Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya. En su lugar, podrán escoger, entre formaciones independientes con un nombre diferente en cada municipio, pero que en sus siglas incluirán la marca Progrés Municipal, Acord Municipal o Entesa del Progrés Municipal. Lo sepan o no, los ciudadanos que voten a estas formaciones engrosarán respectivamente las cuentas electorales del PSC, ERC e Iniciativa, partidos que utilizan las citadas denominaciones para presentarse en municipios donde tienen escasa implantación.
Esta práctica, habitual desde las primeras elecciones democráticas, ha vuelto a ser denunciada por Convergència i Unió al igual que en 2003. Sin embargo, la Junta Electoral Central ya validó entonces sobre la legalidad de listas como la que el PSC impulsa en la capital del Pallars Sobirà bajo el nombre Independents per Sort-Progrés Municipal o la que Esquerra presenta en Copons (Anoia) con la denominación de Units per Copons-Acord Municipal.
Según un acuerdo de la junta electoral de marzo de 2003, "la legislación electoral no impide que una coalición electoral adopte una denominación específica en determinados distritos electorales". Continúa el acuerdo recordando que eso puede hacerse siempre que se mantenga "la referencia a una denominación común, mediante la constancia de la denominación de la coalición o bien las siglas y en su caso el símbolo y las siglas que haya adoptado la coalición".
Las fuentes consultadas en los tres partidos de la izquierda aseguran que esto se cumple a rajatabla. Por ejemplo, en el caso del PSC, todas las listas que impulsa cuentan con las siglas PSC o Progrés Municipal (PM) acompañadas, en muchos casos, del nombre de la formación de independientes que los representa en cada población. Esquerra utiliza la misma fórmula, denominada coalición electoral.
Iniciativa sí presenta una particularidad. Los ecosocialistas tienen una segunda marca, la de la Entesa del Progrés Municipal, que es un partido con todas las de la ley, con estatutos y ejecutiva incluidos.
En cualquier caso, Convergència i Unió ha anunciado una denuncia y la posible impugnación de más de 300 listas porque considera que las formaciones del tripartito "esconden su nombre". "No pedimos la retirada de las listas, sólo que incluyan en ellas el nombre completo del partido", reiteraron ayer fuentes convergentes, que insisten en que las listas de la izquierda en coalición con independientes son "un fraude de ley". Y es que CiU es consciente de que los votos para estos partidos independientes se traducirán en más escaños para PSC, ERC e ICV en las diputaciones y consejos comarcales.