Tráfico sostiene que los conductores son el "factor fundamental" de los accidentes

Echar la culpa al mal estado de las carreteras como causa principal de los accidentes de tráfico puede ser "peligroso". Así lo manifestó ayer el director general de Tráfico, Pere Navarro, quien recalcó que el conductor sigue siendo "el factor fundamental" de los siniestros. "Hay 160.000 kilómetros de carreteras en España. Mientras se arreglan, ¿qué hacemos, seguimos contando accidentes y muertos?", añadió ayer Navarro tras su intervención en la Comisión de Interior del Senado.

En cuanto a la accidentalidad en las vacaciones de Semana Santa, el director de Tráfico aseguró que no hay que ...

Echar la culpa al mal estado de las carreteras como causa principal de los accidentes de tráfico puede ser "peligroso". Así lo manifestó ayer el director general de Tráfico, Pere Navarro, quien recalcó que el conductor sigue siendo "el factor fundamental" de los siniestros. "Hay 160.000 kilómetros de carreteras en España. Mientras se arreglan, ¿qué hacemos, seguimos contando accidentes y muertos?", añadió ayer Navarro tras su intervención en la Comisión de Interior del Senado.

En cuanto a la accidentalidad en las vacaciones de Semana Santa, el director de Tráfico aseguró que no hay que "rasgarse las vestiduras" si ha ido mal. "Seguro que habrá un mes este año en el que haya más accidentes y más muertos que en 2006", lo que no quiere decir, en su opinión, que el carné por puntos "haya fracaso ni esté muerto o enterrado". "Lo que falta es un poco de paciencia. España es un país ciclomótico, capaz de pasar de la euforia a la depresión más profunda en poco tiempo", sentenció Navarro.

El responsable de Tráfico criticó el "excesivo protagonismo" que en las últimas semanas ha tenido, a su juicio, la DGT, y pidió a las Administraciones que asuman "su cuota de responsabilidad" y se comprometan a elaborar planes de seguridad vial, "o esto no funcionará". Navarro lamentó que no todas las comunidades son conscientes de las "importantes competencias" que tienen en materia de seguridad vial. En este sentido, puso el modelo gallego como ejemplo a seguir, entre otras razones porque incluye el objetivo de reducir en un 40% el número de muertos entre 2006 y 2010.