Las calles de Arenal y Montera ya son 'casi' peatonales
El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y varios concejales de su gobierno se dieron ayer una vuelta por Montera y Arenal para declarar oficialmente terminada la peatonalización de ambas calles, por las que pasan a diario 35.000 viandantes (150.000 durante las fiestas navideñas). El fin de obra tiene matices: el último tramo de Montera -desde la calle Aduana al enganche con Gran Vía- no puede tocarse aún porque el Ministerio de Fomento lo tiene ocupado por sus propias obras; y el tramo de Arenal entre la calle Hileras y la plaza de la Ópera -que no será plenamente peatonal sino de "coexistencia" c...
El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y varios concejales de su gobierno se dieron ayer una vuelta por Montera y Arenal para declarar oficialmente terminada la peatonalización de ambas calles, por las que pasan a diario 35.000 viandantes (150.000 durante las fiestas navideñas). El fin de obra tiene matices: el último tramo de Montera -desde la calle Aduana al enganche con Gran Vía- no puede tocarse aún porque el Ministerio de Fomento lo tiene ocupado por sus propias obras; y el tramo de Arenal entre la calle Hileras y la plaza de la Ópera -que no será plenamente peatonal sino de "coexistencia" coche-peatón- se deja para una segunda fase, a ejecutar entre febrero y abril.
En la zona ya terminada de Arenal, los coches pueden cruzar transversalmente sólo por la calle Bordadores, para acceder a los aparcamientos públicos. En el resto de la vía -adoquinada con un pavimento tricolor y sin aceras ni bordillos- está prohibida la circulación de vehículos, incluidos los residentes y los taxis: los turistas, con sus maletas, tendrán que caminar desde la Puerta del Sol para alcanzar los hoteles.