Aguirre incumple la promesa de vetar a los menores en los encierros

Centenares de menores corren cada verano en los encierros taurinos de la región. Hace un año, un chico de 16 años resultó herido muy grave en los de San Sebastián de los Reyes, y entonces el Gobierno regional se comprometió a aumentar de 16 a 18 años el límite de edad para participar en los encierros. Un año después, los menores pueden seguir corriendo delante del toro. Justicia asegura que así se lo han pedido los ayuntamientos.

El Gobierno regional anunció justo hace un año que modificaría el Reglamento de Festejos Taurinos a raíz de lo ocurrido durante el encierro del domingo en San ...

Centenares de menores corren cada verano en los encierros taurinos de la región. Hace un año, un chico de 16 años resultó herido muy grave en los de San Sebastián de los Reyes, y entonces el Gobierno regional se comprometió a aumentar de 16 a 18 años el límite de edad para participar en los encierros. Un año después, los menores pueden seguir corriendo delante del toro. Justicia asegura que así se lo han pedido los ayuntamientos.

El Gobierno regional anunció justo hace un año que modificaría el Reglamento de Festejos Taurinos a raíz de lo ocurrido durante el encierro del domingo en San Sebastián de los Reyes, donde 63 personas resultaron heridas, los dos más graves, de 18 y 16 años. Entonces, el consejero de Justicia, Alfredo Prada, aseguró que modificaría el reglamento para limitar el número de participantes en los encierros y para aumentar de 16 a 18 años el límite de edad para participar. El Defensor del Menor aplaudió entonces la medida.

Pero un año después, todo ha quedado en humo. Los menores de entre 16 y 18 años siguen corriendo delante del toro en los encierros que se celebran en un centenar de municipios de la región (San Sebastián de los Reyes, Leganés, Pinto, Móstoles, Pozuelo de Alarcón...). Desde la Consejería de Justicia, el organismo regional del que dependen los asuntos taurinos, explican que el reglamento finalmente no se modificó "porque no han querido los ayuntamientos donde se celebran los encierros".

"Esta primavera se celebraron en San Sebastián de los Reyes unas jornadas taurinas y los ayuntamientos, las peñas, corredores y expertos taurinos pidieron al Gobierno regional que no subiera la edad para participar, ni se limitara el número de participantes. A cambio, se comprometieron a mejorar las medidas de seguridad", explicó una portavoz de la Consejería de Justicia.

San Sebastián de los Reyes, por ejemplo, ha instalado durante los actuales encierros unas barreras antimiedo con puertas que se abren en el caso de que se produzca un tapón de corredores como el del año pasado. La medida no cuenta con el beneplácito de algunos puristas en asuntos taurinos, que consideran que los encierros, con tanta seguridad, han quedado descafeinados.

Explicación al Defensor

Las medidas respecto al aumento de la protección de las vallas contrastaba en el encierro de ayer con la presencia de adolescentes a lo largo del recorrido. "Recordamos que los menores de 16 años no pueden participar en el encierro", anunciaban desde la megafonía. Pero sí que pueden los de 17 y los de 18. El defensor del Menor, Pedro Núñez Morgades, afirmó que exigirá a la Federación de Municipios Madrileños (FMM) una explicación por la presencia de menores en los encierros. "No encuentro ningún argumento para defender que un menor pueda correr delante de un toro. Los encierros suponen un alto riesgo para los menores, que muchas veces no pueden decir que no, porque todos sus amigos van a participar o porque tienen que hacerse los valientes", señaló Núñez Morgades. El Defensor del Menor no comparte la teoría de que los chicos de 16 años suelen ser ágiles y por eso están preparados para participar en los encierros. "Hay algo más allá de la preparación física. Los menores no tienen por qué estar expuestos a ver los incidentes que se producen durante las carreras taurinas", concluyó Núñez Morgades.

La propuesta de limitar el número de participantes también ha quedado en nada. Hace un año, la Comunidad de Madrid prometió que también habría un número limitado de corredores, que sería de obligado cumplimiento por parte de los ayuntamientos. La limitación del número de corredores se haría mediante una preinscripción previa donde se podría comprobar la edad o que el participante llevaba el calzado adecuado para ponerse delante del toro. Los ayuntamientos se negaron y optaron por que los festejos siguiesen siendo abiertos y de carácter popular.