Elche despide el Misteri de la Dama
Elche cumplió ayer con la tradición y cerró un nuevo ciclo de las representaciones del Misteri con La Festa, la segunda parte del drama asuncionista donde los apóstoles velan el cadáver de la Virgen hasta que un grupo de judíos irrumpe en la sala y se produce un forcejeo. Un judío que intenta tocar el cuerpo de la Mare de Déu queda paralizado ante ella y en ese momento todos se convierten. Juntos entierran a la Virgen hasta que su alma sube al cielo y es coronada como la madre de Jesucristo. El oropel, el volteo de campanas y el disparo de cohetes envuelven una emoción y un senti...
Elche cumplió ayer con la tradición y cerró un nuevo ciclo de las representaciones del Misteri con La Festa, la segunda parte del drama asuncionista donde los apóstoles velan el cadáver de la Virgen hasta que un grupo de judíos irrumpe en la sala y se produce un forcejeo. Un judío que intenta tocar el cuerpo de la Mare de Déu queda paralizado ante ella y en ese momento todos se convierten. Juntos entierran a la Virgen hasta que su alma sube al cielo y es coronada como la madre de Jesucristo. El oropel, el volteo de campanas y el disparo de cohetes envuelven una emoción y un sentimiento en cantores y público difícil de describir por sus múltiples matices. Y es que el Misteri es religión, tradición, música, teatro, cultura popular y herencia de siglos y siglos que a nadie deja frío.
Las fiestas han atraído a más turistas que nunca por la presencia del busto ibérico
Mientras se representa el Misteri, alrededor de la basílica de Santa María de Elche se colocan carteles en los que se pide silencio a los viandantes. El respeto con el que se trata este evento es propio de algo solemne y especial y así se percibe hasta por los turistas con bermudas y chanclas que en su casual paseo por el centro histórico ven cómo unos niños disfrazados de ángeles con unas rizadas pelucas rubias salen de la Casa de la Festa acompañados de séquito de personas de traje y corbata unos, vestidos de fiesta otros, y se dirigen a la iglesia.
Se dice que el Misteri es la ópera más antigua que se representa, pero los niños y adultos que cantan en él no son profesionales y su voz no ha sido educada. Los papeles se transmiten de padres a hijos, como otras tareas de La Festa. Los tramoyistas que trabajan en el cielo (así es como llaman a la cúpula de la basílica de donde descienden los aparatos aéreos), o los que realizan su labor bajo el cadafal (el escenario), han heredado el puesto de sus padres y estos de los suyos.
El Misteri d'Elx ha finalizado, pero este año, por ser año par, hay una segunda oportunidad de verlo en las representaciones extraordinarias de otoño, el 29 de octubre y 1 de noviembre. Mientras tanto, desde hace unos años, existe el Museu de la Festa, donde, a través de un audiovisual y varios objetos, se intenta explicar cómo es el Misteri a los visitantes. Este año han llegado a la ciudad más turistas que nunca a causa de la exposición del busto de la Dama en el Museo Arqueológico y de Historia de Elche.