Josep Guinovart exhibe sus pinturas azules y líricas en el Museo Marítimo

Tras un largo recorrido por numerosas localidades de Cataluña, llega al Museo Marítimo de Barcelona (avenida de las Drassanes, s/n), la exposición Guinovart. Memòria del blau, que reúne una selección de obras del proyecto pictórico homónimo, presentado por el artista Josep Guinovart en 2002, con motivo de su 75º aniversario. La exhibición, abierta hasta el 5 de junio, incluye 26 piezas realizadas en su gran mayoría entre 2000 y 2005, además de cuatro obras inéditas de este año, creadas especialmente para este espacio. Memòria del blau es un proyecto del programa de la Oficina de ...

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Tras un largo recorrido por numerosas localidades de Cataluña, llega al Museo Marítimo de Barcelona (avenida de las Drassanes, s/n), la exposición Guinovart. Memòria del blau, que reúne una selección de obras del proyecto pictórico homónimo, presentado por el artista Josep Guinovart en 2002, con motivo de su 75º aniversario. La exhibición, abierta hasta el 5 de junio, incluye 26 piezas realizadas en su gran mayoría entre 2000 y 2005, además de cuatro obras inéditas de este año, creadas especialmente para este espacio. Memòria del blau es un proyecto del programa de la Oficina de Difusión Artística (ODA) del Área de Cultura de la Diputación dirigido a impulsar y apoyar iniciativas artísticas en los ayuntamientos barceloneses.

Tal como su título indica, la exposición se centra en la irrupción de color azul en la obra de Guinovart (Barcelona, 1927), que en los últimos años ha abandonado su paleta de rojos y ocres y su habitual dramatismo para zambullirse en un universo más lírico y sosegado. Esta transición cromática se hace especialmente evidente en dos piezas de grandes dimensiones Nit al Cap de Creus, de 1991 e Ítaca, de 2001. El azul como metáfora del cielo y del mar se combina con los recuerdos de la infancia del artista y la cultura mediterránea, en obras de diversas formas y dimensiones, que a menudo incluyen elementos orgánicos, espejos y objetos encontrados.

Hay piezas en las que Guinovart escribe palabras con el dedo en el color como si se tratara de arena y otras que materializan los ideales románticos de la tormenta y el naufragio con un ventilador que agita trocitos de papel. La exhibición, de la que es comisaria Raquel Medina de Vargas, tenía que terminar su periplo en Barcelona, pero finalmente se clausurará en Castelldefels (del 9 de junio al 23 de julio), donde el artista tiene su estudio, precisamente enfrente del mar que inspira su trabajo.

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