"El amor y la capacidad de perdonar son los únicos sentimientos que nos redimen"
"Podría haber sido así". María García-Lliberós recurre a esta frase que oyó decir a Mario Vargas Llosa sobre su libro La fiesta del Chivo para dar cuenta del grado de ficción que hay en su última novela, Babas de caracol (editorial Aurea). Se trata, no en vano, de una historia "mitad real y mitad fantasía", que se alimenta de acontecimientos escuchados tiempo atrás por la autora. Durante la II República se aprobó el divorcio, pero a los pocos años, la legislación franquista lo suprimió y con carácter retroactivo. "Esto causó no pocos dramas", apunta la autora. Berta, la protagoni...
"Podría haber sido así". María García-Lliberós recurre a esta frase que oyó decir a Mario Vargas Llosa sobre su libro La fiesta del Chivo para dar cuenta del grado de ficción que hay en su última novela, Babas de caracol (editorial Aurea). Se trata, no en vano, de una historia "mitad real y mitad fantasía", que se alimenta de acontecimientos escuchados tiempo atrás por la autora. Durante la II República se aprobó el divorcio, pero a los pocos años, la legislación franquista lo suprimió y con carácter retroactivo. "Esto causó no pocos dramas", apunta la autora. Berta, la protagonista de la novela, vivió un auténtico calvario. Ya casi centenaria deja en testamento una importante suma de dinero para un conocido escritor a condición de que éste escriba el relato de su vida. De ahí la elección del título del libro, extraído de una cita de Francis Bacon, Babas de caracol, que alude a la necesidad de Berta de dejar "un rastro más allá de su existencia". El escritor, al que le acaba de dejar su mujer y se encuentra en una crisis de creatividad, inicia, así pues, una ardua investigación que le llevará por caminos insospechados hasta llegar a obsesionarse por la vida de Berta, sus odios y sus profundos sentimientos.
García-Lliberós pasó un año documentándose para preparar el contexto político, social e histórico, además de estudiar la legislación sobre la mujer promulgada durante el pasado siglo. Un apartado al que le ha prestado un especial cuidado. "Las leyes afectan directamente a la felicidad de los ciudadanos", señala la autora de novelas como Equívocos (premios de la Crítica Valenciana y finalista del Ateneo de Sevilla) o Como ángeles en un burdel (Premio Ateneo de Sevilla).
En Babas de caracol, García-Lliberós tenía un material de partida con un gran potencial novelesco y ha ido desarrollándolo mientras daba "rienda suelta" a su imaginación. Pero insiste: si bien los personajes son invenciones, las cosas podrían haber pasado de la manera en que se narra en el libro. "El amor y la capacidad de perdonar son los únicos sentimientos que nos pueden redimir", concluye la escritora.
Para ella, la novela es sobre todo una forma "magnífica de contar historias a través de la escritura", al mismo tiempo que procura material para estimular la reflexión sobre cuestiones muy diversas.
Babas de caracol se presenta hoy en el Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Valencia (a las 19.30) y mañana en el mismo centro en Castellón.